Investigadores hallaron que comer mucha carne roja y pocas frutas y verduras puede aumentar la ‘edad biológica’ del cuerpo y contribuir con diversos problemas de salud, informa The Guardian.
Los científicos encontraron que un aumento moderado en los niveles de fosfato en la sangre, producto del consumo de carne roja -en combinación con una dieta pobre en fibra y vegetales- serían causantes de un envejecimiento biológico mayor al esperado; es decir, no acorde a la edad cronológica.
El estudio fue liderado por la Universidad de Glasgow, en Escocia, y analizó a personas desde las áreas menos deprivadas a las más deprivadas, cubiertas por el sistema público de salud de Greater Glasgow.
Los resultados sugirieron que, entre los hombres de más bajos recursos, el envejecimiento biológico acelerado y los altos niveles de fosfato estaban directamente relacionados con la frecuencia del consumo de carne roja. Estos factores también tuvieron algo que ver con las reducciones en las funciones renales y enfermedad renal crónica.
Los niveles de fosfato muy altos ya se han relacionado antes con un mayor riesgo de muerte, con envejecimiento vascular prematuro y con enfermedad renal.
Traducción CCV El Ciudadano