Nadie habría adelantado un final tan emocionante. A tres bandas se jugaba el final del torneo. O’Higgins en Rancagua tenía la mayor opción y se enfrentaba a Universidad de Concepción con una fiesta preparada que el equipo de Ronald Fuentes se encargó de estropear.
La UC estaba obligada a ganar para presionar a los demás partidos -Colo Colo se medía con Santiago Wanderers y lo ganó en el último minuto, con lo que estuvo muy cerca de jugar una final con el cuadro celeste- y estaba cayendo en San Carlos de Apoquindo.
Pero dos tantos en el segundo tiempo, anotados por David Llanos y José Pedro Fuenzalida hacían el milagro posible. Eso porque los tantos de Renato onzález y Fernando Manríquez -que metieron al cuadro del Campanil en Copa Sudamericana- desataban el desastre en la Sexta región. El descuento de Braulio Leal para O’Higgins dejó la incertidumbre hasta el final, pero finalmente, el equipo que dirige Mario Salas fue campeón cuando menos se pensaba.