Avanzadas tecnologías capaces de producir dos veces, y con mayor rapidez, la cantidad de notas redactadas por humanos, han propuesto instalar importantes gerentes de medios de comunicación en Estados Unidos.
The New York Post informó la semana pasada que John Micklethwait, editor en jefe de Bloomberg y miembro del poderoso Grupo Bilderberg, notificó a los más de 2 mil periodistas empleados en el medio la creación de un equipo de 10 personas que estudiarán cómo iniciar una “mayor automatización de la redacción y reporteo” de noticias.
Micklethwait afirmó que la automatización de las comunicaciones “será tan buena como la hagan los humanos”, ya que “el computador podrá generar una historia o un titular por sí mismo, pero necesitará de humanos que le digan qué buscar, dónde buscar y garantizar a nuestros lectores independencia y transparencia”.
Ya en 2014 un artículo publicado en The New York Magazine bajo el título “Los robots invaden el mercado de noticias”, citó las declaraciones de Ken Doctor, analista del consumo de medios en la llamada ‘era digital’.
“En el futuro, predice Doctor, los robots no sólo competirán con reporteros. Colaborarán con nosotros, preparando párrafos con datos concentrados que podremos complementar con nuestro propio análisis, produciendo un artículo híbrido”, indicó la revista.
“Ser capaces de leer un comunicado de prensa o entrevistar a una persona y escribir un artículo comprensible en 750 palabras no es suficiente… usaríamos computadoras para hacer el trabajo básico de organización de datos, y el juicio y análisis, la interpretación y la experiencia, sería agregada por humanos”, precisó Doctor.
Un paso similar tomó Associated Press en 2014, cuando contrató los servicios de Automated Insights para incluir máquinas de inteligencia artificial en la redacción de artículos.
Pese a los aires de modernidad que adornan estos anuncios, el portal Silent Crow afirma que el reemplazo de humanos por máquinas sólo obedece a un intento por abaratar los costos de la industria de multimedios, de la misma forma en que “McDonalds está eliminando su fuerza de trabajo, sustituyéndola por robots que sirven a los clientes debido al aumento del salario mínimo de $15 dólares la hora en EEUU”.
Sobre este mismo tema, el ex productor de investigación periodística de ’60 Minutes’, Charles Lewis, quien además fundó el Center for Public Integrity (CPI), entregó una visión crítica en un artículo publicado en 2014.
“Menos organizaciones de noticias comerciales apoyan el periodismo de investigación ahora que en cualquier momento de la historia, y los reporteros – especialmente los que buscan agresivamente las verdades que el gobierno, las empresas y otras poderosas instituciones buscan acallar – están más solos, más expuestos y más vulnerables al daño profesional y físico que nunca antes», afirmó.