Esta pregunta da vuelta por mi cabeza cada vez que miro al pueblo de Caimanes luchando por sus derechos y no sólo a Caimanes, sino que a todas las comunidades que han sido arrasadas por Pelambres, en este momento pienso en los nombres de una larga lista de «socialistas» arrodillados, que recogen las migajas del dinero del saqueo de nuestro cobre, conseguido por las empresas capitalistas a golpes de engaños y violencia en contra del pueblo chileno.
Antecedentes rescatados de investigaciones serias, que han denunciado la infiltración ideológica neoliberal en el partido de Allende, dan cuenta de la apatía y sicopatía de estas empresas en contra de los seres humanos, principalmente, de las comunidades rurales a las que dejan sin agua y sin tierra y torturan con el desarraigo, entonces vuelvo a preguntar ¿qué diablos hacen allí, personas del partido de Allende? Me respondo, que se puede ser del Partido Socialista y ser ideólogo del capitalismo, pero eso no es lo mismo que ser Socialista, a pesar de que sé que es una manera de atenuar la esquizofrenia política, que nos dejó a muchos socialistas fuera del partido.
Las multinacionales, son dirigidas por personas y las personas “son”rostros,
historias, pensamientos; lo pienso, mientras escucho el discurso “de saludo a la bandera” que el PS regional de Coquimbo hace en la mañana de un sábado de octubre en la Casa Gremial del Colegio de Profesores del Choapa, donde se encuentran tres mujeres y ocho hombres de la comunidad de Caimanes en huelga de hambre, debo reconocer que por lo menos algunos militantes del PS que viven en Illapel, realmente se han involucrado en esta movilización del pueblo de Caimanes, pero no como PS.
Mi mente vaga por muchos rostros, recuerdo a mi padre, un Socialista de consecuencia ejemplar en la defensa de la clase trabajadora de la que era parte y pienso ¿Se puede ser Socialista y despreciar al pueblo vendiéndolo a las transnacionales, se puede ser Socialista en Chile y defender los intereses de los dueños de las multinacionales, se puede pensar en el pueblo y a la vez utilizarlo para conseguir poder y dinero? Vuelvo a responderme “se puede, sí, ser del Partido Socialista y hacer todo eso, pero no se puede ser Socialista y traicionar y usar a las personas humildes en función del capital”.
De pronto me viene como un chispazo y recuerdo a la Juventud Socialista de mis años en la universidad y pienso en el rostro de ese muchacho relajado de la carrera de Castellano en la ULS (Universidad de La Serena) de los años 80 que era de la JS, Manuel… Manuel creo que se llamaba o ¿Miguel? Bueno, da lo mismo, pero siempre me llamó la atención su falta de asertividad, lo sorprendí en momentos de decisiones con varias respuestas no compatibles, presa fácil para las intenciones nefastas de la política negociadora de esos tiempos, cuando en Chile se definía el futuro de los movimientos políticos, que más tarde, sometidos a las estructuras neoliberales, nos llevarían a la explotación salvaje de nuestros recursos y a la agudización de la desigualdad social, que no es otra cosa que saqueo imperialista; definiciones que también nos llevarían al intervencionismo cultural y educacional por parte de ideologías necrófilas e inhumanas.
En lugares como el Choapa, inclusive se han instaurado corporaciones culturales y políticas educativas intervencionistas, que se alimentan de las dádivas basureras de las mineras poderosas y a cambio de las repartijas manchadas con contaminación letal, callan y hacen el trabajo sucio de lavar la imagen del malhechor, aquí se han agregado, inclusive, ex autoridades concertacionistas, que no fueron capaces de asumir la pérdida de sus cargos de poder después de la derrota, y otros, que nunca han sabido lo que es hacer un currículum; también, arribistas amigados que de vez en cuando reciben algunos pesitos para cuestiones menores y se venden por poca plata ¿Quién permite este intervencionismo, este “juntos crecemos más” de la Minera Los Pelambres que se inserta en la educación del Choapa como autoridad en la materia, creando algo así como un ministerio colateral? Y aclaro, esto no es de ahora, es desde el gobierno de la Concertación.
Recuerdo y pienso en los rostros corporativos de Pelambres, esos “hombres
rostros” a los que utilizan los jefes, los emperadores de la muerte del Choapa y ahí está ese “Manuel” o ¿”Miguel”? se me confunden los nombres, pero sé que ahora es representante ideológico, corporativo y de otras cuestiones; parece que es un representante de bondades, testaferros también les llaman, está allí, lavando imagen donde no se sabe de las maldades de la empresa que representa, allí donde los compromisos son lujo a costa de la muerte de las comunidades y de la manipulación ideológica y comunicacional, allí donde la educación cumple un papel preponderante en la base del pensamiento, se encuentra ese Manuelmiguel o Miguelmanuel del servilismo, el militante de la JS de los años 80 que quería ser “alguien en la vida” y acabo de recordar otro detalle, practicaba teatro.
Vuelvo al discurso emblemático de apoyo moral de Eduardo, uno de los visitantes PS regionales de la mañana de un sábado y la pregunta impertinente por mi parte no se hace esperar; digo: “ya que el conflicto de Caimanes es con la Minera Pelambres y ustedes son Socialistas apoyando esta acción a favor de los huelguistas y su comunidad, quisiera preguntarles si uno de los hombres visibles, ideólogo de la Empresa es militante del partido que representan y que se hace presente aquí a través de ustedes ¿Manuel (o Miguel) es militante PS? Me responde que “tiene entendido que sí”, le digo que es “sí o no” y me responde “sí” frente a los huelguistas y a otros testigos, entonces pregunto ¿Se puede ser Socialista y ser símbolo, cara visible, representante de una multinacional que construye tranques de relaves tóxicos de 245 metros de altura poniendo en riesgo evidente la vida de toda una comunidad? ¿Se puede tener en la memoria, respeto por el Presidente Salvador Allende que murió defendiendo a Chile del saqueo transnacional del cobre y ser testaferro de este poder? Y por último, si los Socialistas del PS son realmente Socialistas ¿Por qué no expulsan a militantes que traicionan al pueblo y ayudan a saquear el cobre? Espero una respuesta, desafío a la respuesta, aún sabiendo que esta pregunta nunca podrá tener una explicación decente.
¿Cómo decía ese himno antiguo que mi padre cantaba con sus amigos? “Contra el presente vergonzante, el socialismo, surge ya …” ¿Acaso el presente no es vergonzante, acaso el pueblo no está maltratado por el imperialismo transnacional? ¿Alguien me puede decir dónde están los Socialistas?
El día lunes 25 de octubre, el pueblo de Caimanes se desplegó en las calles de
Illapel, acompañado por otras comunidades también afectadas por Pelambres, vi pasar rostros, muchos rostros, muchas voces, ojos, manos, personas, seres humanos que compartían el mismo sentimiento, que vinieron a demostrar que no es dinero lo que quieren, ellos quieren que se vayan los invasores que les trajeron desgracias. Niños y niñas, abuelas y abuelos, mujeres y hombres de la tierra. Ese día a mi me pareció escuchar desde muy lejos, desde alguna órbita del pasado a mi viejo padre: “Socialistas a luchar, resueltos a vencer…” ¿Dónde se fueron todos, por qué no están donde el pueblo defiende sus derechos? ¿No van a volver de nuevo? ¿Entonces, se puede ser socialista y ser ideólogo o imagen corporativa de una multinacional?
No me he referido a militantes DC porque de ellos se puede esperar servilismo hacia la clase dominante y a veces pertenecen a esta clase dominante, el PR … no importan tanto y el PPD importa menos, porque como dice un amigo mío que es del PPD: “son como un bolsillo de payaso, si metes la mano sacas cualquier cosa”.
Mi pregunta está dirigida a los socialistas, porque todavía son muchas las personas que esperan algo de ellos, que los verdaderos depuren el partido y expulsen a los infiltrados, que vuelvan al fundamento, que vuelvan a educar al pueblo sobre la base de valores de identidad cultural y desarrollo intelectual, que defiendan a los trabajadores y a los humildes explotados por el capital, que defiendan el ambiente seguro en el que todo ser humano tiene derecho a vivir, que defiendan la igualdad y la democracia verdadera. Que no sean derrotados por estos zánganos, que quieren hacernos creer que no existen los pilares ideológicos de otro tiempo, que no nos convenzan de que los ideales de vida ya no existen, cambiemos las palabras que instauran la muerte y defendamos la vida “Socialistas a luchar, resueltos a vencer, fervor, acción hasta triunfar nuestra revolución”.
Por Ana Leyton