La ganadora del episodio de ayer en Vértigo fue Fernanda Urrejola. No sólo eso, sino que la actriz también confesó una fuerte vivencia de su infancia, en el espacio «Hora de la Verdad», de una íntima entrevista con Martín Cárcamo.
Urrejola habló por primera vez de los abusos sexuales que sufrió desde que tenía 7 años. «Es un tema súper complejo, y la verdad es que algo como eso te marca para siempre. Pero yo por suerte recuerdo mi infancia como un momento muy feliz, como un episodio de mi vida muy feliz. A pesar de eso fui una niña feliz».
La actriz habló sobre el delicado tema con Cárcamo, comentando que era una situación que no entendía de pequeña, cuando se sentía muy culpable por los hechos. Dice que si bien ésto marcó su infancia, no cambió su forma de «ser de piel», y no se dio cuenta sino hasta años después.
«Yo soy una mujer muy de piel, muy regalona, muy de piel. Y también yo creo – y me costó mucho- entenderlo, que tenía una parte sensual muy desarrollada. Y a pesar mío un poco. Y eso generaba mucha confusión hacia los hombres, me imagino. Yo tenía siete años la primera vez que eso ocurrió y fueron varios episodios, por suerte no pasó a violación».
Urrejola comentó que encaró al responsable de los reiterados abusos años después. Nunca pasó a violación, pero guardó su secreto hasta los 19 años, cuando le contó a sus padres.
La participante dijo que todo ocurrió por primera vez con un amigo años mayor que ella. Ahí tenía entrenamientos en Católica, los que terminaban más temprano que los de sus hermanas, al ser la menor. Ahí entabló una amistad que terminó en el primer abuso: «Yo tenía una relación con él, tenía un vínculo con él, un vínculo emocional».
Después, en otras ocasiones volvió a pasar por lo mismo, confesó que al menos tuvo 6 episodios distintos. Anteriormente había confesado su depresión cuando adolescente, y que intentó quitarse la vida a los 16 años, lo que estaba muy arraigado a los abusos.
“Eso te marca mucho y yo obviamente tuve un rollo muy potente con la sexualidad desde ahí, y me costó mucho sentirme una mujer sexy y desarrollar ese lado. (…) Para mi durante mucho tiempo, el sexo era una demostración de amor más que un placer», comentó.
La actriz dijo querer contar su historia para demostrar que a pesar de lo duro de ello, se podía salir adelante y no vivir sólo como víctima.