Cuatro amigas decidieron poner en evidencia el acoso callejero diario que se puede recibir en Ciudad de México. Las cuatro fueron vestidas de negro, caminando por las calles de Centro y Juárez y el Paseo de la Reforma. Con una cámara oculta grababan lo que les decían, cómo las miraban, cómo las trataban.
Los resultados pueden parecer sorpresivos, pero en muchas ciudades más así es la realidad. Algunos no lo toman en cuenta, otros no lo viven, y hay quienes lo ignoran. No sólo las acosan, incluso hay un hombre que las sigue y se masturba en plena vía pública, frente a ellas.
Algunos saludos inocentes, otros no tanto. De todo tuvieron que escuchar estas chicas, como lo hacen muchas personas más a diario y de manera anónima, a veces incluso peor. Su consigna para responder era: «Si no me conoces, no me hables», la principal respuesta que dieron a sus «acosadores».
«Nos costó trabajo prepararnos para sus reacciones», comentó una de las «Morras» creadoras de este ‘experimento’. Ésto fue totalmente real, sólo que no bajo los parámetros científicos convencionales.
Ya acumula más de 40 millones de reproducciones y muchas reacciones distintas. Con éste video se quiere aportar a abrir la discusión sobre qué es el acoso, y cuál es el límite, entre otras cosas:
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