A veces la naturaleza puede resultar algo cruel cuando se trata de la supervivencia de los animales más débiles. Muchas veces los animales que nacen más débiles o con algún problema físico, son rechazados por el grupo e incluso por su propia madre, siéndole aún más difícil sobrevivir.
Marcia, una cabra bebé, se encontró en esa situación nada más nacer, y es que debido a un problema, es ciega de nacimiento. La madre la rechazó y la cabra fue rescatada por Farm Sanctuary, una asociación que da cobijo a los animales de granja abandonados o con problemas.
Marcia sólo se encontraba segura cuando uno de los cuidadores estaba a su lado, en caso contrario se ponía muy nerviosa y sentía pánico. “Cuando los cuidadores tenían que salir y dejarla sola, Marcia se volvía histérica. A menudo comenzaba a dar vueltas en círculos hasta tener de nuevo a un cuidador a su lado“, cuentan desde Farm Sanctuary.
Sin embargo, la salvación de Marcia no era un cuidador, sino otra cabra que había sido rescatada y que rápidamente se convirtió en su amiga fiel. Maurice no sólo encontró en Marcia la compañía que necesitaba, sino que además no lo dudó antes de convertirse en sus ojos, protegiendo a su amiga.
“Cuando Maurice escuchó por primera vez el llanto de Marcia, en seguida corrió a su lado y sin saber muy bien cómo, la tranquilizó, y el llanto desapareció“. Desde entonces, tal y como cuentan los cuidadores, Marci no ha vuelto a soltar un grito de angustia o soledad. Su nueva amiga la ayuda a desayunar o incluso a arroparse por las noches.
La historia de estas dos amigas emociona porque nos demuestra, una vez más, lo fundamental que es el cariño para no tener miedo. Estas dos cabras han encontrado su camino y felicidad gracias a unos voluntarios que ponen todo su empeño en darle una segunda oportunidad a todo tipo de animales. Su historia completa es realmente emocionante:
https://youtu.be/10AWOAP9l5Y