Han pasado ya 7 años desde que terminó la serie juvenil de TVN, Karkú, que fue un total éxito. En esta, un grupo de adolescentes contaban sus vidas, además que compartían una pasión: la música, a través de la que estrenaron la banda «Six Pack».
Uno de los personajes principales era «Zico», interpretado por Ignacio Sepúlveda, que a diferencia de algunos de sus colegas en la serie, no quiso continuar con una carrera en las pantallas, ni relacionada a la actuación.
Con apenas 17 años, Ignacio fue premiado junto a Six Pack, llegando a ganar un premio Mtv por «Mejor Artista Nuevo». Hoy ya tiene 25 años, y su destino ha dado un giro algo inesperado, lejos de lo que prometían esos años en su incursión en la televisión y en la música.
En una entrevista a Bio Bio, Ignacio comentó sobre su presente. Tras alejarse de las cámaras decidió privilegiar sus estudios, terminando el colegio tranquilamente, para luego estudiar Dirección y Producción de eventos en la Universidad del Pacífico.
Tras hacer la práctica en la agencia de publicidad Tribu Ideas, logró el contrato. Mas después de un tiempo se cambió a la productora DG Medios, donde ayudó en la organización de varios eventos. Volvió a migrar a la agencia We Clap, en donde conoció otro ámbito de la publicidad.
Después de mucho tiempo trabajando, decidió renunciar y tomarse unas merecidas vacaciones, en las cuales se fue a Perú con un primo. Hoy trabaja en una nueva empresa y dedica su tiempo a sus hobbies: su perro y la motocicleta.
Ignacio asegura que en su familia todos son amantes de «las ruedas», desde sus abuelos hasta él y sus primos. Su pasión es la bicicleta, pero también ha andado en moto, hasta hace un tiempo cuando tuvo un accidente que le ha imposibilitado arriesgarse tanto.
“Casi pierdo el dedo gordo, tengo dos operaciones”, comentó. No ha sido un gran cambio en su vida, pero ahora se dedica más a correr y andar en bicicleta. En marzo fue su primera carrera y ha conseguido algunos auspiciadores que lo ayuden con su gran pasión.
Su tiempo libre, además del deporte, lo disfruta con su bull terrier Emilia, que le regalaron hace dos años. Por ahora, parece que parece ir todo bien en la vida de Ignacio y que no tiene planes de volver ante las cámaras.