Esta joven musulmana de 22 años y de nombre Zakia Belkhiri tuvo la respuesta más adolescente posible cuando vio a un grupo de protestantes anti-musulmanes gritando mensajes de odio en Bélgica: decidió sacarse unas selfies épicas, haciendo símbolos de paz y sonriendo ante quienes entregaban un mensaje de odio. Su grupo de amigas también decidió hacer lo mismo.
Belkhiri estaba asistiendo a la tercera Expo Musulmana anual en Amberes, cuando vio a miembros del partido político nacionalista de extrema derecha, Vlaams Belang, protestando contra la celebración cultural. Fue cuando sin dudarlo, corrió frente al grupo de intolerantes para tomarse unas cuantas selfies frente a letreros que anunciaban: «No a los pañuelos sobre la cabeza» y «Paren el Islam», que luego compartió en su cuenta de Twitter @rabiosaloca, el cual curiosamente ha sido dado de baja en días posteriores a la publicación y cuando ya llevaba miles de likes.
Pero no sólo ella hizo fotografías épicas. Las imágenes que están recorriendo el mundo, fueron realizadas por el fotógrafo Jurgen Augusteyns, quien al ver la acción de la joven decidió disparar su cámara y capturar el valiente gesto lleno de inocencia de Zakia.
Mira aquí las fotografías que demuestran que es posible ridiculizar la discriminación con una sonrisa: