“La idea es pegarle a Walmart y Cencosud”

«Aquí nos impusieron este modelo, tenemos el más neoliberal del mundo, donde no existen los derechos y exportamos basuras como las AFP y las Isapres. Somos los únicos en el mundo, por lo que será aquí donde se desarrolle el primer cambio».

Con esta premisa Carlos Mancilla, ingeniero civil industrial de 34 años, sostiene las bases del proyecto Incoludido.cl, el que de forma colaborativa pretende romper el cerrado mercado del papel higiénico, que hoy tiene como protagonistas a las empresas involucradas en el bullado caso de “Colusión del Confort”. A través de una novedosa estrategia de difusión que incluye afiches callejeros, redes sociales y un cómic, disponible en la web, ha logrado hacerse conocido como una alternativa a las grandes marcas que se vieron involucradas en el escándalo de la colusión.

En conversación con El Ciudadano, Mancilla nos relata cómo se gesta el proyecto y su ambicioso objetivo de cambiar el paradigma empresarial chileno.

-¿Cómo nace el proyecto Incoludido.cl?
-Incoludido es una parte de un proyecto más grande, más ambicioso, basado en el social growing. Yo soy ingeniero civil industrial, salí de la Universidad Santa María, trabajé en IBM, luego pasé a BHP Billiton y me dí cuenta de que esas organizaciones todas funcionan de igual manera… nadie dentro de esas organizaciones puede ser feliz. Puedes ganar plata pero nadie es feliz dentro.

Este sistema no funciona. Sólo produce infelicidad, problemas sociales e inequidad, además de tener externalidades ecológicas gigantes. Entonces estamos destruyendo todo nuestro medioambiente, todo socialmente. Chile, siendo el país más neoliberal del mundo, cuenta con las tasas de depresión y suicidio por acá [haciendo gesto con la mano en alto], ves que todos estos sistemas que soportan hoy nuestra vida nos cagan por todas partes.

-Eso se puede ver en cada momento…

-Claro, las Isapres nos cagan, la AFP nos caga… entonces uno se pregunta ¿qué sistema aquí en Chile funciona para nuestro bienestar? Ninguno. Todos tienen el objetivo de maximizar la utilidad del accionista y, para ello, las empresas explotan a los trabajadores, cagan a sus clientes, reducen los costos al máximo. Eso está mal.

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-Hay grupos económicos que sostienen el sistema que describes. ¿Qué papel viene a jugar Incoludido en este escenario?
-Lo que busca social growing es cambiar el paradigma empresarial, para cambiar el paradigma económico mundial. No puedo entender que esto -el modelo de vida actual- sea lo mejor que podamos hacer y que tengamos que aceptar. Éste es otro tipo de organización, es una organización acorde a los tiempos, los que nos invitan a generar nuevos modos de vida, otros nuevos modelos de relacionamiento. Esta empresa, Incoludido, trabaja de forma opuesta a las empresas tradicionales y es mucho más eficiente.

-¿Qué genera Incoludido en la gente que trabaja en el proyecto?
-Esta organización no busca la maximización de la utilidad sino que la maximización de la felicidad. Y para lograr maximizar la felicidad del conjunto, es necesario maximizar la felicidad de cada persona, lo que tiene relación con la energía de cada persona… si vas mal tienes poca energía, si vas bien tienes alta energía. Existen mediciones de los índices de felicidad, que desarrollan diferentes empresas consultoras, siendo el promedio nacional un 45%. Nosotros, con una red de 35 personas, alcanzamos el 95% en esta medición.

-¿Cuál es el modelo que desarrolla Incoludido?
-Desarrollamos un trabajo en red. Para estos conceptos de nueva organización, necesitábamos un negocio potente que lo pusiera en el tablero, como un nuevo actor. Ahí es donde explota el tema de la colusión. Hacemos un análisis del mercado y, en eso, escucho a Hermógenes Pérez de Arce diciendo que Matte no tenía por qué pedir perdón, y esas cosas. Finalmente me puse a cotizar afuera y claramente es más barato. Hasta hoy CMPC, SCA, Kimberly Clark y las marcas propias dominan el 100% del mercado… son los principales grupos económicos los que controlan el 100% del mercado del papel higiénico. Ahí surge Incoludido, es decir comprar papel higiénico y venderlo más barato, entonces comenzamos a desarrollar la estrategia de marketing, a construir la historia del cómic.

-¿Cómo se financia el proyecto?
-La forma de financiamiento es a través de un crowfounding, pero igual necesitamos gente que nos preste plata. Entonces, por un lado, está el crowfounding, que es todo un desafío pues significa instalar este modelo de financiamiento en el país. Lo que es muy importante para financiar estos nuevos tipos de organizaciones es que seamos nosotros mismos los que las financiemos, no podemos esperar que llegue un Luksic y diga «ahora sí que la vamos a hacer bien».

-¿Cómo opera este crowfounding?
-Es simple. Levantamos este fondo por un monto de 15 millones de pesos para comenzar a trabajar, entonces cada persona que ponga 10 mil pesos reciben 48 rollos de Incoludidos en sus casa, y según el monto que pongan pueden acceder a diferentes packs.

-¿Cómo proyectan a Incoludido al corto o mediano plazo?
-Incoludido es el primer proyecto de una serie de productos, de diferentes segmentos, en diferentes industrias. En el mediano plazo esperamos el inicio de una serie de servicios que compitan en este mercado. Esto en un mercado que mueve 550 millones de dólares al año. Entonces el negocio del papel higiénico nos va a permitir sustentar otra serie de servicios.

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-¿Este proyecto tiene características diferentes al modelo tradicional de empresa, cuales distingues como principales?
-Si bien legalmente somos una empresa, en lo práctico somos una cooperativa, donde las utilidades se reparten, a diferencia del modelo actual donde el capitalista se lleva todo.

-¿Cuáles son los proyectos que siguen a Incoludido?
-La idea es entrar con todos los productos básicos, siendo la estrategia de distribución a través de los almacenes de barrio, no entregaremos nuestro producto en supermercados. Porque la idea es pegarle a Walmart y a Cencosud.

-¿Has tenido alguna reacción por parte los empresarios del rubro o en general de ese mundo?
-En general hemos recibido buenos comentarios, pero el mundo empresarial chileno no logra salir de la lógica empresarial capitalista. Ellos quieren poner plata, apoyar pero lo que buscan es el retorno, y que sea rápido. Ellos no entienden la lógica de este proyecto, que a la larga busca modificar el paradigma empresarial. Ésta es una innovación tan grande que es como si estuviéramos invirtiendo en Google. La mentalidad y los conocimientos de los grupos económicos de ese segmento, que podemos ver su forma de actuar y en cómo operan para protegerse, son del siglo pasado, se quedaron pegados y no tienen voluntad de cambiar. Están muy desactualizados. Nosotros somos una organización súper joven, donde todos salimos de nuestros trabajos hastiados y ahora estamos generando un modelo nuevo y que sí funciona desde el punto de vista creativo y de sistema.

–¿Cuál es el beneficio social de este proyecto?
-Este es un proyecto colaborativo en todos sus aspectos, tiene un marketing positivo que deja algo en los ciudadanos y nos van llegando felicitaciones cada día.