El artista británico Jenny Ayrton crea diminutos países de las maravillas, inspirada en la vida cotidiana, sobre bloques de vidrio fundido. La mayoría de las escenas cuenta la acogedora vida en el hogar y se ven influidas por el entorno de Ayrton. Para crear las piezas, construye modelos diminutos de malla de alambre y metal, que luego quedan encerrados entre dos capas de vidrio caliente. Después de que el vidrio se ha enfriado, muele la base y hace algunos toques finales pulido.