Micael Favre murió por un problema cardíaco

El último fin de semana, la muerte volvió a sacudir al fútbol argentino. Micael Favre, jugador de 24 años del club San Jorge, falleció en medio del partido de su equipo ante Defensores, por la Liga Departamental de Colón, Entre Ríos, luego de recibir un rodillazo -sin intención- y una trompada en la cara.

Tras la autopsia realizada el lunes, se conoció el informe preliminar de la morgue policial de Oro Verde que determina que Favre no murió a causa de los golpes recibidos en su cabeza, sino debido a una dolencia cardíaca preexistente.

Durante el encuentro disputado el sábado, el futbolista fallecido trastabilló y, en la caída, un rival lo golpeó en la cara; luego de pararse para recriminarle el golpe, otro rival llegó corriendo y le pegó una piña que lo derribó. Al intentar levantarse nuevamente, quedó tendido. A pesar del inmediato traslado al hospital, los médicos que lo atendieron no pudieron hacer nada y perdió la vida.

Los peritos de la causa indicaron que, pese a que existen rastros de los golpes, la muerte fue ocasionada por un problema cardíaco que no era nuevo, lo que haría virar la situación de los dos jugadores involucrados en el lamentable suceso, Fabio Larrosa y Gerónimo Quintana, quienes fueron trasladados a la sede policial para su identificación, pero no quedaron detenidos. La lupa de la Justicia ahora podría posarse sobre los controles médicos del club.