EEUU: Descubren primer caso de temida superbacteria resistente al antibiótico más brutal

Por primera vez, investigadores encontraron a una persona en Estados Unidos portando una bacteria resistente a los antibióticos, un hallazgo alarmante para las autoridades de la salud pública en ese país, quienes dijeron que podría significar «el final del camino» para los antibióticos, informa The Independent.

La bacteria resistente fue encontrada hace un mes en la orina de una mujer de 49 años en Pensilvania. Los investigadores del Departamento de Defensa determinaron que su infección se debía a una cepa de E.coli resistente al antibiótico colistina, de acuerdo a un estudio publicado el jueves en Antimicrobial Agents and Chemotherapy, una publicación de la Sociedad Estadounidense de Microbiología. Los autores escribieron que el descubrimiento anuncia la emergencia de una «bacteria resistente a múltiples drogas».

La colistina es el último recurso antibiótico existente hasta el momento y se usa especialmente para casos de bacterias muy peligrosas, incluyendo a una familia conocida como CRE, que las autoridades de la salud han apodado «bacterias pesadilla». En algunos momentos, estas superbacterias llegan a matar hasta al 50% de los pacientes que se infectan. Los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) han dicho que las CRE constituyen una de las mayores amenazas de salud pública en EEUU.

Esta es la primera vez que se encuentra una cepa resistente a la colistina en una persona estadounidense. El noviembre pasado, autoridades de la salud de todo el mundo reaccionaron con preocupación ante una investigación de científicos chinos y británicos que reportaba haber encontrado bacterias resistentes a la colistina en cerdos, en su carne cruda y en un grupo de personas en China. Más tarde, la cepa fue encontrada en Europa y otros lugares.

«Básicamente significa que no estamos tan lejos del final del camino en términos de antibióticos; que podríamos estar en una situación en la que tendremos pacientes con infecciones críticas, para los cuales no habrá antibióticos efectivos», explica el director de CDC, Tom Frieden, en una entrevista.

«He estado con pacientes en estas condiciones. He cuidado pacientes para quienes no ya no hay un medicamento efectivo y es un sentimiento de horror y desesperanza», agrega Frieden. «Esta no es la situación en la que queremos estar».

Por largo tiempo ya, científicos y autoridades médicas han advertido acerca de las bacterias resistentes y han dicho que si siguen propagándose podrían limitar seriamente las opciones de tratamiento. Las operaciones de rutina podrían volverse más riesgosas o hasta mortales; igualmente algunas infecciones menores. La neumonitis podría ser cada vez más difícil de tratar.

Los médicos ya han tenido que verse forzados a usar la colistina como última barrera contra las superbacterias, pero su uso altamente conflictivo. Es un medicamento que tiene más de medio siglo y que causa serios daños a los riñones, pero en vista de que han ido en aumento los casos en que antibióticos más modernos no ayudan, han tenido que recurrir a esta droga como medida de emergencia.

Hay dos formas en que las bacterias se volvieron resistentes a los antibióticos. Muchas desarrollan mutaciones en sus propios genomas, las que les permiten aguantar a los antibióticos, aunque es habilidad no puede ser compartida con patógenos de otras familias.

Otras bacterias recurren a un atajo: se infectan con una molécula llamada plásmido, una pequeña pieza de ADN que acarrea un gen resistente. Esto hace a los genes más resistentes y peligrosos, porque los plásmidos pueden replicarse a sí mismos y transferir a otras bacterias los genes que acarrean, ya sean de la mima familia o de otras. Así las bacterias pueden aprehender la resistencia directamente, sin tener que desarrollarla por un proceso de evolución. El E.coli encontrado en la paciente de Pensilvania tiene este tipo de gen.

Traducción CCV El Ciudadano