La imagen de Guillermo Fariñas (Santa Clara, 1962) con la piel pegada a los huesos dio la vuelta al mundo en 2010. Mantenía una huelga de hambre que duró 135 días en protesta por la muerte de su compañero Orlando Zapata, que falleció por emprender un gesto similar con el objetivo de pedir la liberación de los presos políticos de la isla. Por aquella acción de difusión mundial consiguió el Premio Sajarov de aquel mismo año, que entrega el Parlamento Europeo y el cual no pudo recoger en persona hasta 2013.
No fue la única vez que dejó de comer para luchar por los derechos humanos de sus compatriotas, lo ha repetido más de una veintena de veces. ¿Lo volvería hacer? Eso depende de los actos represivos del Gobierno», responde rotundamente en una entrevista con EL MUNDO durante su visita a Madrid para pedir al Gobierno español, junto a otros opositores, el respeto de las libertades de los cubanos. Una misión que no sólo ejerce como opositor al régimen, también como periodista y director general de producciones Nacan.
¿Todavía es perseguido por el régimen cubano?
Sí, sí. [Responde de forma tajante].
¿Nada ha cambiado desde que recibió el Sajarov?
La forma de tortura en mi caso no es golpeándome, es sentarme dentro de un lugar pequeño y ponerme aire acondicionado durante cinco o seis horas. Hemos denunciado que es tortura por hipotermia, porque ellos saben que tengo una operación en el pulmón como secuela de la huelga de hambre. Y, sobre todo, tratar de difamar y confundir.
¿Cuándo fue la última vez que fue detenido?
El 8 de mayo. Fuimos a los cementerios de cada localidad a hacer la ofrenda floral a nuestro mártir, Juan Wilfredo Soto García, que fue asesinado en 2011. La Policía revolucionaria le reventó el páncreas.
¿Cuál es la situación del resto de disidentes?
El Gobierno ha tenido que aumentar el nivel de represión, incluso con las nuevas relaciones Cuba-EEUU, porque la ciudadanía cada día protesta más. Incluso las personas del Partido o del ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias o del ministerio de Interior no están de acuerdo con el precio de los alimentos, con el problema de la vivienda, con los altos precios de las cosas dentro de Cuba… La protesta es cada día más generalizada. El Gobierno tiene miedo de que esta vanguardia, que es la oposición interna no violenta, logre canalizar estas insatisfacciones y se produzca una explosión social. Están tratando constantemente de sacarles de circulación a los más activos, que sean menos conocidas. Realmente las personas más activas, pero no tan conocidas, son arrestadas, golpeadas, chantajeadas, empujadas a tener que ir al exilio.
¿No ha cambiado nada en Cuba desde el deshielo?
No, ha empeorado. Hemos cambiado, pero para peor. Ha aumentado el número de arrestos. El año pasado hubo 10.000. Si en el mes de mayo hubo casi 6.000, vamos a tener por lo menos 12.000 este año. Además, la gravedad de esos arrestos: las palizas, las amenazas y los encarcelamientos han ido en aumento. Cuando hicimos la huelga de hambre, quedaron en las cárceles cubanas alrededor de 40 presos políticos. Ahora, estamos hablando de 100. Tenemos también modalidades de represión y de tortura, como es el caso de los militantes de la UNPACU [Unión Patriótica de Cuba, la organización política opositora que tiene mayor número de miembros]. Sientan y amarran a sus militantes, los ponen encima de hormigueros en medio del campo, las hormigas les pican y les causan intoxicaciones, que hasta ahora no han sido fatales, pero en cualquier momento van a serlo.
¿Podríamos hablar de una nueva Venezuela en Cuba?
Yo creo que en estos momentos no. Porque el pueblo cubano, fundamentalmente la juventud, que es la que menos acepta las opciones social, política y económica, tiene una manera de huir que es mediante la Ley de Ajuste Cubano. Ellos saben que si ponen el pie en el territorio de EEUU, se pueden quedar a vivir allí para siempre. Muchas personas se están haciendo ciudadanos españoles, para poder venir a España. Esas son válvulas de escape que tiene todavía el Gobierno cubano. Pero, por ejemplo, en el Congreso, tanto en la cámara alta como en la baja, de EEUU se está discutiendo la eliminación de la Ley de Ajuste Cubano. Eso va a hacer que sea imposible escapar hacia EEUU si uno hace primero una labor de enfrentamiento político al régimen y la situación económica de España impide que muchos cubanos que están aquí puedan decirles a sus familiares que vengan para acá. Digamos que dentro de ocho meses o un año, que es cuando finalmente se va a aprobar la Ley de Ajuste Cubano, va a ser muy factible el tema de la explosión social como se está produciendo en Venezuela.
¿Qué le parece lo que está ocurriendo en ese país?
El pueblo venezolano por suerte, decidió desde el primer momento no huir. Decidió dar la batalla adentro. El Gobierno castrista implantó a nivel social la matriz de que el problema era huir, de que el problema lo iban a resolver los americanos en algún momento, en algún momento iban a invadir… Esto no era así y mucha de la posición vive en el exterior. Pero los venezolanos tomaron nota de esto, de que los problemas hay que resolverlos entre los nacionales, no hay que acudir a ninguna fuerza extranjera. Es una cuestión de meses lo que va a ocurrir ahí. Ojalá no se aferren los gobernantes [al poder] y eviten una guerra civil.
¿Será posible el revocatorio?
Yo creo que se van a aferrar al poder, pero hay una serie de condiciones políticas y económicas en el mundo y, sobre todo, en América Latina, hay mucha presión sobre el Gobierno venezolano. Ellos saben que de producirse una guerra civil, lo van a perder todo. Mientras que si ellos pierden el poder momentáneamente, puede ser que lo puedan recuperar en otro momento.
¿Qué opina sobre el caso Leopoldo López?
Creo que es una venganza de los cubanos que dirigen el SEBIN (Servicio de Inteligencia Bolivariano), que está ocupado plenamente por cubanos. Ellos caracterizaron que Leopoldo López tenía rasgos indiscutibles de liderazgo y están tratando de dejar a la oposición venezolana sin líderes. Eso, si no llegamos a ser un poco fuertes, podría ocurrir con otros líderes que hay en Venezuela. Porque ellos están tratando de que haya personas que estén en contra del chavismo, pero que no tengan líderes que canalicen y que sepan conducir adecuadamente.
Entonces, ¿lo de López es una venganza de los propios cubanos?
A Leopoldo López le arrestó el SEBIN y el SEBIN está ocupado plenamente por los cubanos. Cuba busca el control de los recursos de Venezuela para poder a través de ese control manipular políticamente el Caribe, América Latina, África… Como Cuba no tiene esos recursos naturales, usa la ideología para que otros se los entreguen y ellos poder tener poder de manipulación.
¿Hay muchos cubanos en Venezuela?
Ellos reconocen 44 mil cubanos, pero nosotros consideramos que debe haber alrededor de 80.000 cubanos que residen en Venezuela. Porque ellos tienen ocupado el ministerio del Interior y el ministerio de las Fuerzas Armadas. A cualquier cubano le pueden poner la nacionalidad y pasar por venezolano. Realmente, eso no se sabe con exactitud, pero nosotros tenemos la experiencia de oficiales cubanos que nos han reprimido a nosotros durante mucho tiempo y que ahora están en Venezuela…
¿Qué efecto tuvo la visita del Papa a Cuba?
No ocurrió nada extraordinario. El Papa bajo ningún concepto se pronunció sobre la situación política y económica empobrecida que hay en Cuba. No se pronunció a favor de los presos políticos, no criticó al Gobierno en ningún concepto.
Ahora que nuestros empresarios están desembarcando allí. ¿En qué han cambiado las relaciones España-Cuba?
No hay ningún mérito en hacerle juego a ningún tipo de dictadura, sea de izquierdas o sea de derechas. Los empresarios españoles están arriesgándose. Hemos tenido y siempre vamos a tener, mientras esté la dictadura ahí, ocupaciones arbitrarias de empresas que los españoles han instalado en Cuba. Porque en Cuba se está negociando con una Junta militar, que está encabezada por Alejandro Castro Espín y su cuñado, Luis Alberto Rodríguez López Calleja, que es el que maneja la economía del país. Estos militares, cuando las ganancias de los empresarios extranjeros son altas, simplemente les quitan la propiedad, lo asumen ellos y hasta ahora no han indemnizado a nadie. Yo diría a los empresarios capitalistas que tengan cuidado, que están tratando con mafiosos que están en el poder.
EL MUNDO publicaba el jueves que un cubano había comprado datos de políticos españoles…
El Gobierno cubano necesita tener datos de Inteligencia de las figuras prominentes de cualquier país para poder chantajearles cuando vayan a Cuba.