Esta es la diferencia entre un «orgasmo natural» y un «orgasmo ideal»

Por si no lo sabías, hay diferentes tipos de orgasmos. No sólo se trata de cómo se producen, sino de lo que producen. Según el psiquiatra brasileño José Ángelo Gaiarsa, hay dos categorías claves, y que quizás no habías experimentado.

El experto psicoanalista ha enfocado su carrera en lo corporal, de manera que logró categorizar y teorizar sobre los dos tipos de orgasmos que existen: el orgasmo natural, y el orgasmo ideal.

Según Gaiarsa, el orgasmo natural es de origen más instintivo, o reproductor, para algunos. Se refiere a un lapso de segundos o pocos minutos, muy intenso y casi desesperado. Es parte de nuestra naturaleza más básica. En los animales se ve cuando el macho (en este caso el hombre) lo hace muy rápido sin poder parar. No tiene relación con las emociones, ni con el placer. Es una demostración de valentía.

En el caso femenino o de las hembras, es cuando se exagera el comportamiento sexual, con muchos gritos y golpes. Esto hace que sea más una pelea que un intercambio significativo. Por lo mismo, al llegar al orgasmo se «explota», y hay una gran energía.

Más que placer, nos otorgaría una sensación de poder y fuerza, por lo que sería en actos sexuales más impersonales, o animales.

Pero por otra parte, según el autor, encontramos al orgasmo ideal. Este sí está ligado a la búsqueda y entrega de placer, no es sólo el estallido sensorial y ya, sino que se pretende tener una sensación más prolongada de ello, lo que claramente tiene que ver con las emociones y el romance.

Por lo mismo, este orgasmo es una fusión, y causa un «derretimiento» que provoca una pérdida de identidad, un dejar ir ambos egos personales, para dar origen a un nuevo centro. Es, finalmente, una especie de mezcla de las dos personas que lo comparten.

Se llega así a un estado de «gracia natural», o más comúnmente denominado como sexo con amor. Hay atracción y más que eso: hay emociones, lo que permiten que el placer sea compartido, no egoísta, y que sea real, traducido a una felicidad resultante del acto sexual.

Tanto el orgasmo ideal como el natural nos pueden satisfacer, pero son caminos totalmente opuestos. El orgasmo ideal no sólo afecta tu vida sexual, sino que trasciende en todo ámbito: potencia la vida, aumenta el ánimo, el optimismo y estimula las ganas de vivir.

¿Cuál prefieres tú? O: ¿crees que has vivido ambos tipos de orgasmo?