Las cosas que haces inconscientemente y que pueden ilusionar y dañar al otro

Este es un texto desde la postura de un hombre hacia las mujeres , que a veces no alcanzan a notar lo mal que nos hacen

Las cosas que haces inconscientemente y que pueden ilusionar y dañar al otro

Autor: Priscilla Villavicencio

ilusionar con ryan gosling

Este es un texto desde la postura de un hombre hacia las mujeres , que a veces no alcanzan a notar lo mal que nos hacen.
¿Han visto la película “Blue Valentine”? Pues cuando nos enamoramos nos convertimos en el personaje de Ryan Gosling, el eterno enamorado que entrega todo sin esperar nada. Sí, ya sé, ustedes nunca lo piden, pero no ven que son nuestra más grande debilidad. Lo malo, si no es correspondido nuestro sentimiento, es que estaremos ahí por siempre sufriendo, esperando a que un día quieran amarnos de la manera que lo hacemos.

En la cinta, el moderno Romeo se aferra a su más grande amor, incluso a pesar de que ella tenga un hijo con otro hombre. Eso es lo de menos, porque para estar juntos haremos hasta lo absurdo. Con estas palabras sólo queremos demostrar lo vulnerables que somos cuando nos enamoramos. Este amor que sentimos surge por las cosas que hacen inconscientemente y nos ilusionan. ¿Cuáles son?


Mandarnos mensajes todos los días

ilusionar con mandarnos mensajes

Aunque parezca algo muy inocente, cuando hablamos todos los días y todo el tiempo nuestro corazón se acelera al mil por hora. Vivimos esperando su llamado. Si están tan constantes es fácil pensar que les interesamos y sin querer entregaremos nuestra alma a sus lindos ojos.


Llamarnos con sobrenombres tiernos

ilusionar con apodos tiernos

Como nos mandamos mensajes todo el tiempo, o nos vemos seguido en la escuela o el trabajo, es natural que querramos algo más. Ustedes a veces nos llaman guapo, cariño o corazón. ¿Por qué lo hacen si en realidad no nos aman? Puede que guarden tanta dulzura que su boca lo único que libere sean palabras como miel, pero por favor, no nos ilusionen.


Aceptar salir más de lo normal

ilusionar con salir más de lo normal

Nosotros todo el tiempo vamos a querer estar con ustedes. Entre más tiempo estemos a su lado, mayor será nuestra felicidad. No nos reprochen que cada tercer día estemos invitándolas por un helado, a ver una película o a recorrer las calles sin hacer nada específico. Así somos y lo seguiremos haciendo. Si ustedes no quieren una relación, ¿cuál es el caso de aceptar salir?


Invitarnos a salir con amigos o familiares

ilusionar con salir

Cuando comienzan a incluirnos en sus planes nosotros lo tomamos como una señal importante. Sentimos que estamos a unos cuántos pasos de llegar a su corazón, o incluso ya estamos ahí. Si nos invitan a un evento familiar y nos presentan con todas las personas, es como vivir el más profundo sueño y todo parece perfecto. Lo malo es cuando nos dejan caer, el golpe contra el concreto nos hiere de muerte.


Darle like a todas nuestras publicaciones

ilusionar con darle like

Todo lo que nos gusta está en las redes sociales. La relación es la siguiente: “si le da like a todo, es porque le gusta lo mismo que a mí –entonces somos almas gemelas–, o porque está tan interesada que se adapta a mis gustos, o lo que es mejor, quiere acaparar mi atención también por Internet para que sólo tengamos tiempo de pensar en ella”. Eso es lo que pasa por nuestra cabeza.


Mientras “jugamos” hacen que nuestros cuerpos rocen tiernamente

ilusionar con juegos tiernos

Dicen que juego de manos es de villanos, pero nostros creemos que es de amantes, de compañeros de vida y de amores eternos. Los juegos estremecen nuestras entrañas y cuando sentimos cerca sus cuerpos la mariposas revolotean y las piernas se doblan. Si lo hacen, está sobre entendido que sienten lo mismo que nosotros y, por tanto, nos uniremos.


Que acepten salir con nuestros amigos o familiares

ilusionar con salidas familiares

Es obvio que las queremos en nuestras vidas, por eso siempre tratamos de incluirlas en nuestros planes. Cuando aceptan significa que entendieron nuestro sentimiento y lo que sigue es la culminación del amor. Ya entraron en nuestro ser, lo reconocieron, lo tocaron y descubrieron qué es lo que buscaban, lo que siempre estuvieron anhelando. ¿Me amas? Yo sí.


Pedir que las llevemos hasta su casa

ilusionar con llevaras a casa

Nosotros estamos dispuesto a acompañarlas hasta el fin del mundo, pero cuando nos piden que vayamos a sus casas, podemos tomarlo como la señal de que todo está a punto de cocinarse, que detrás de una puerta se encuentra el santuario que nos aliviará tanto dolor que cargamos creado por la larga espera. Si no lo sabía y creían que era un acto inocente, ahora no hay pretextos.


Invitarnos a entrar a su casa

ilusionar con entrar a la casa

Cuando nos invitan a pasar, la bomba del amor se detonó dentro de nosotros. Al fin lo logramos, abrimos el candado de su corazón y lo que sigue es sólo amor, gozo, deseo, placer. “Me entrego a ti en cuerpo y en alma. Tómame y nunca me sueltes”.


Se despiden de una manera muy tierna

ilusionar con la despedida

Su boca es un fruto dulce que reanima el alma. Cuando se despiden y su boca toca nuestro rostro todo se ilumina y nos elevan al cielo. De ahí nunca querremos bajarnos y las invitamos a volar a nuestro lado. Si el beso de despedida va acompañada de una caricia pensamos que todo está hecho. “Seré tuyo por siempre, hasta que tu mirada deje de reflejar el sol y tu vientre la luna”.

Estas son algunas de las cosas que hacen para que nuestro corazón se llene de calor hacia su persona. Si nunca van a amarnos con la misma intensidad, lo mejor es que no nos ilusionen porque siempre terminamos sufriendo. Mejor déjenos contemplarlas a lo lejos, ahí donde el sol las ilumina y su figura parece una obra de arte que viene y se aleja sin crear alguna herida. Así vivirán en nuestros corazones de la manera más pura durante mucho tiempo.

Ryan Gosling ilusionar

Vía Cultura Colectiva 


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