El Gobierno de China anunció este martes que «no acepta y no reconoce» el dictamen del tribunal de La Haya, tras conocer el veredicto de la Corte Permanente a favor de Filipinas sobre el Mar Meridional de China.
Según informa TeleSUR, un vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores declaró que «el proceso ha sido ilegal y por tanto no se puede reconocer, no lo hemos hecho desde el principio».
Dijo que el veredicto viola los principios de la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos al Mar (Unclos, por sus siglas en inglés), pues según el artículo 298 no se contempla el arbitraje obligatorio sobre varios temas, en lo que se incluye los límites marítimos.
El gobierno ratificó su disposición de resolver cualquier disputa de forma pacífica a través de la negociación entre las partes involucradas directamente en el tema y rechazó la intromisión de Estados Unidos.
La nación subrayó que aboga por la resolución de la disputa por medio de negociaciones, pero algunos expertos estiman que recurrirá a una «retórica fuerte», aunque sin acciones agresivas.