El presidente de México, Enrique Peña Nieto, pidió disculpas por el escándalo que también involucró a su esposa, hace dos años, por la compra de una casa de US$7 millones a un contratista del gobierno.
La adquisición de la llamada «Casa Blanca» afectó la confianza del pueblo en la Presidencia, admitió el mandatario.
Aunque Peña Nieto aseguró que no había violado la ley, prometió redoblar sus esfuerzos para combatir la corrupción en México.
Peña Nieto hizo las declaraciones durante la promulgación del nuevo Sistema Nacional Anticorrupción (SNA), el cual incrementa la vigilancia sobre el patrimonio de la clase política y los funcionarios públicos.
Humildad y perdón
En su disculpa, el presidente mexicano reconoció su «error», que no sólo afectó a su familia sino que también «lastimó la investidura presidencial y dañó la confianza en el Gobierno».
Subrayó que los servidores públicos, además de actuar con toda integridad, son responsables de cómo se perciben sus acciones.
«Con toda humildad les pido perdón, les reitero mi sincera y profunda disculpa por el agravio e indignación que causé», expresó.
Peña Nieto y sus esposa fueron criticados cuando se supo de la compra de lalujosa residencia del Grupo Higa, uno de los principales contratistas del gobierno.
El presidente reaccionó airadamente y su esposa, Angélica Rivera, negó que se hubiera cometido algún delito añadiendo que la compra se había hecho con los ingresos de su carrera como actriz.
Rivera se vio obligada a devolver la mansión que había estado pagando en cuotas.
Luego surgió que el ministro de Finanzas de Peña Nieto también había adquirido una casa del mismo contratista, pero una investigación concluyó que no hubo actividad ilícita.
Los analistas señalan que el escándalo también pudo haber dañado las relaciones de México con China, tras la cancelación de un contrato multimillonario ganado por un consorcio encabezado por un grupo chino, el único licitador, para construir una vía férrea de alta velocidad en ese país latinoamericano. El Grupo Higa formaba parte de ese consorcio.
Peña Nieto se comprometió a trabajar en el marco del SNA para «erradicar los abusos de quienes no cumplen con la ley». El partido de gobierno, el PRI, sufrió fuertes pérdidas en las recientes elecciones locales. Las próximas elecciones presidenciales se celebrarán en 2018.