Cuando se planea una noche romántica con tu pareja, se espera que todo salga bien. La cena, los preliminares, el sexo y su culminación orgásmica…. pero la velada no termina ahí. Muchos hombres realizan cosas que pueden terminar con el romanticismo y sensualidad que tanto habían logrado durante horas.
Ya no sabotees tus logros pasionales y conoce cuáles son las actividades que NUNCA debes hacer después de tener sexo. ¡Toma nota y a sorprender a tu pareja!
1. COMPARAR
Evita cualquier frase como: “Con mi ex…”, “El mejor sexo que he tenido fue…”. La mujer que tienes a tu lado es lo que menos quiere oír. Imagina que si las comparaciones en la vida cotidiana son fatales, ahora cómo caen en esta situación.
2. CORRER POR TU SMARTPHONE
De seguro conoces lo molesto que es compartir la mesa con alguien que está pendiente de sus notificaciones de Facebook, Twitter, Whatsapp, etc. Ahora, imagínate eso pero en la cama: Incomodidad a la décima potencia. Pero si es ella la que recurre a su smartphone, nos es triste informarte que ha llegado el momento de emprender la retirada.
3. PEDIR PERDÓN
¿Por qué tendrías que hacerlo? Vayamos a los extremos y pensemos que tu desempeño no fue tan bueno como esperabas. No te preocupes, recarga fuerzas y lánzate para una segunda ronda.
4. PEDIR PUNTUACIÓN
Podríamos aceptarlo, si es que ambos decidieron cumplir una fantasía erótica. Pero en caso de que no sea así, evítalo de cualquier manera. Mantente seguro de que lo has hecho bien. Tampoco es válido que le preguntes: ¿cuántos orgasmos tuviste? Lo único que lograrás es romper la magia del momento.
5. PREGUNTAR: ¿ME QUIERES?
Si has tenido sexo con tu esposa, prometida o novia, la respuesta es más que lógica, es obvio que ella te quiere. Ahora si es una primera experiencia, entonces la pregunta resultará de lo más incómoda y posiblemente nunca vuelvas a ver a esa mujer.
6. PEDIRLE QUE SE DUCHE
No olvides que eres un caballero, el hecho de hacerle esta petición (aunque sea de la manera más amable), logrará hacer sentir incómoda a tu pareja. Tampoco es válido que una vez que hayan terminado, te levantes de la cama y salgas corriendo al baño. Si quieren prolongar el momento, ¿por qué no intentar compartir un sensual baño?
7. UNA CHARLA DESMEDIDA
Puede que tus conocimientos sobre el origen de las especies, la teoría cuántica o la mitología nórdica son vastos y dignos para sorprender a cualquiera; sin embargo, deberás guardarte este tipo de charlas para otra ocasión.
8. PREGUNTAR: ¿EN QUÉ PIENSAS?
Quizá no sólo es una pregunta fuera de lugar en este momento, sino también en la vida de una persona. Incluso en la primera cita, cuando ambos se han quedado sin plática, no es válido sacarla a flote. Te aseguramos con uno 90% de certeza, que la respuesta será: “En nada”.
9. DORMIR
Contrario al punto anterior, tampoco te recomendamos que al terminar la sesión de sexo te des la media vuelta en la cama y duermas a pierna suelta, dejándola ahí a la deriva. Aprovecha el momento y extiendan las caricias, las sonrisas y los coqueteos.
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10. TODO EN SU LUGAR
Todo debe quedar ordenado. El condón usado no debe esperar largo rato tirado en el suelo, mucho menos encima de la cama. Deja pasar un tiempo de charla, caricias (como ya te lo hemos recomendado), levántate, tira el condón y regresa lo más pronto posible a la cama.
11. PREGUNTAR: ¿A QUÉ HORAS TE VAS?
Si te gustó el sexo que tuvieron, entonces para qué hacerlo. Y en caso de que no haya sido así, no es la manera de pedirle que se retire. No saques la frase ni aunque tengas un compromiso muy importante de trabajo, nunca, nunca lo hagas.
12. ENCENDER LA TELEVISIÓN
Si ambos llegaron al acuerdo de encenderla, para seguir disfrutando del momento, es válido. No así si lo haces por tu cuenta y sin consultarla.
13. HACERLE FIESTA A LA MASCOTA
Sabemos que el cachorro, gatito o cualquier animal que tengas como mascota, es tu amigo fiel e incondicional; sin embargo, ella no querrá que luego de haber terminado, “Rocky” (o como quiera que se llame) entre y se suba a la cama. Las caricias y los piropos deben ir dirigidos a la chica que está a tu lado, no a la mascota.