Economista de Fundación Sol sobre cambio al sistema de pensiones: “No se necesita más plata. Este es un tema de poder”.

Los datos entregados por Marco Kremerman, economista de la Fundación Sol, apuntan a la factibilidad de un cambio en el sistema previsional chileno, desde la capitalización individual a un modelo de reparto solidario. “La plata está. Si mensualmente, ingresan más de 500 mil millones de pesos vía cotizaciones y se pagan 200 mil en pensiones, si tuviéramos otro sistema, no se necesitan más aportes del Estado”, comentó en entrevista con radio ADN.

Parte de su exposición se orientó a exponer las deficiencias del actual modelo de las AFP, porque a su juicio, “es un ahorro privado obligatorio, no tiene nada que ver con el concepto genuino de seguridad social. Algunas personas legítimamente pueden decir que no les interesa la seguridad social y que quieren arreglárselas solos, pero ¿cuándo hemos discutido eso como sociedad? Nunca, porque esto se hizo en dictadura”.

Kremerman acotó que el 91% de las pensiones de vejez, las más masivas del sistema, están por debajo de los 156 mil pesos. Además, apuntó a los datos extraídos del informe de la Comisión Bravo, que señalan que la mitad de las personas que cotizaron entre 25 y 35 años, lo hará con una taza de reemplazo inferior al 22%. “Es como si una persona que tuvo un salario promedio de 500 mil pesos, durante sus últimos 10 años, sacara una pensión por debajo de 110 mil pesos”, comentó.

Desde Fundación Sol proponen pasar a un sistema de reparto solidario, considerando el monto de las cotizaciones pagadas por los trabajadores. Al respecto, el economista señaló que “al año 2014, se ingresaron más de 7 billones de pesos en cotizaciones y algunos aportes del fisco, y se pagaron 2,8 billones de pesos en pensiones. Si tú comprometes una taza de reemplazo del 70% y todo el excedente que queda lo pones a rentabilizar, ojalá en una matriz productiva distinta de lo que hoy se rentabiliza, para los momentos donde el envejecimiento de la población sea más acelerado (20 años más), te vas generando un colchón, que impide que tú subas el gasto público que todo sistema de reparto tiene”.

Kremerman criticó las correcciones propuestas desde la Asociación de AFP, porque no dan solución en el corto plazo a los pensionados. “Aumentar la edad de jubilación y la taza de cotización con el mismo sistema, sólo va a permitir que en 30 años más mejoren las pensiones”, sostuvo.