Desde hace un par de meses, un grupo de estudiantes y militantes de la Unión Nacional Estudiantil (UNE) vienen trabajando en la construcción de un espacio político y educativo que busca contribuir a la creación de identidad y comunidad en Villa La Reina.
La Universidad Popular es hoy una corporación educacional -que ya cuenta con personalidad jurídica- y que nace con el objetivo de desarrollar múltiples espacios educativos que aporten herramientas a los vecinos y vecinas de la comunidad, tanto como para mejorar su calidad de vida como para enfrentar el escenario político y los desafíos por venir.
La primera de sus apuestas se instala en la creación del Preuniversitario Popular, que ya completa dos meses de funcionamiento bajo la lógica de acortar las desigualdades del sistema en el acceso a la educación superior.
Así lo explica Fernando Encina, director de la Universidad Popular Villa La Reina: «La educación es una demanda muy sentida por la población y sobre todo en las familias que no tienen el dinero para enviar a su hijos a colegios caros y generar un proceso de preparación en miras de la universidad. En Villa La Reina, en particular, en relación a las otras villas de la comuna o de la zona oriente, las familias están en una posición bastante desfavorecida para poder desarrollar esa proyección».
Este proyecto, señala, «no merma nuestra tarea de querer transformar el sistema educacional en su conjunto», pero busca atacar la desigualdad en el ingreso a la universidad entregando herramientas a los jóvenes que les permitan una mejor preparación de las pruebas actuales de selección.
En adelante, la Universidad generará espacios para el aprendizaje de oficios que permitan a los vecinos y vecinas ir desarrollando sus destrezas y mejorar sus condiciones de empleabilidad. Además, la instancia contempla la intención de formar dirigentes y asesorar a organizaciones sociales en este ámbito.
«Nos interesa que las personas que participan de la Universidad vayan desarrollando sus habilidades para el beneficio de su comunidad, que puedan mover a su gente e ir movilizándolos por distintas causas que hoy son necesarias», apunta Encina.
LA APUESTA POR LA EDUCACIÓN POPULAR
Entre sus principales valores, la Universidad Popular se define como un espacio abierto a la comunidad y de perfil democrático y participativo. Esto quiere decir que las decisiones y el rumbo del proyecto son definidas por una asamblea democrática que integra a profesores, alumnos y administradores de la Corporación.
La Unión Nacional Estudiantil (UNE) forma parte fundamental del proyecto, convocando a los equipos docentes y posibilitando la instalación del proyecto que hoy se desarrolla en la Casa de Mujeres Hoy (Andacollo 510, esquina Chapilca), de una organización feminista que lucha contra de la violencia hacia la mujer.
Trinidad Aguirre, militante de la UNE, señala que la organización se ha definido como tarea disputar la concientización de las comunidades desde sus espacios. Así, «el proyecto popular nos permite romper con los esquemas verticales de la educación, que es segregadora, y empezar a formar un sentido común en el trabajo conjunto de retroalimentación».
En esta mirada, la educación popular es entendida como una herramienta de quiebre, que permite transformar no sólo desde las herramientas académicas, sino también entendiendo el espacio como uno de formación política. «Lo académico es sólo una herramienta, no es el fin en sí mismo», explica. En este sentido, el preuniversitario cumple con la misión de convocar a las familias y a los jóvenes a involucrarse en el proyecto.
Además, la instancia perfila otra arista de trabajo de la organización política universitaria -UNE-, que se muestra interesada en integrarse en los espacios sin asistencialismo, pero comprendiendo lo necesario del trabajo territorial. En esta misma línea se han desplegado proyectos que buscan empujar al movimiento sindical y articular la crítica y la reflexión desde espacios como Fundación Crea.
«Esto no es sólo para alimentarse el ego, ni se centra sólo en la disputa estudiantil. Queremos instalar un sentido común en sectores de vulnerabilidad donde se ha perdido», relata Aguirre.
UN ESPACIO DE CONFLUENCIA
En un escenario de interés y necesidad de participación creciente, en el caso de las nuevas generaciones, el llamado de la Universidad Popular Villa La Reina es a involucrarse en los procesos políticos y sociales. En el espacio, nuevas organizaciones políticas están invitadas. «Queremos ser un espacio de confluencia«, explica Fernando Encina, quien además es candidato a concejal de la comuna.
Por ahora, el proyecto enfrenta sus primeros desafíos luego de la inauguración de la Universidad durante el pasado sábado. El principal objetivo de la ceremonia fue presentarse ante la comunidad, invitándolos a todos y todas a participar de sus proyectos y de su mantención.
Los miembros de la universidad ya elaboran una red de ayudistas que puedan ayudar a sostener la iniciativa, además de contemplar la postulación a fondos concursables. Sus organizadores aseguran que quienes deseen aportar con dinero, materiales o fuerza de trabajo están convocados a seguir profundizando la instalación del proyecto, que nuevamente desafía las carencias de la educación formal chilena. Esta vez, desde el corazón del territorio, una estrategia que vuelve a ganar terreno dentro de las organizaciones políticas de izquierda.