El gobierno de Rusia anunció este viernes el despliegue en Crimea de su sistema más avanzado de misiles de defensa antiaéra S-400, en respuesta a la tensión que se vive en esa península, anexada a Moscú en 2014.
Esto luego de que, el titular del Comité de Relaciones Internacionales ruso, Alexéi Pushkov, denunció que el presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, ordenó poner en alerta las unidades que se encuentran en la frontera entre Ucrania y Crimea y junto a la línea divisoria en Donbás.
Anteriormente Rusia había informado sobre la detención en territorio crimeo de un grupo subversivo con planes de sabotaje en la península, entrenado por la dirección de inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania.
Los servicios de seguridad rusos señalaron que el objetivo de los sabotajes serían desestabilizar Crimea de cara a las elecciones legislativas de septiembre.
El presidente Petro Poroshenko refutó las acusaciones de Rusia y catalogó de provocaciones el arresto del grupo diversionista, en tanto la cancillería adujo que las imputaciones eran infundadas.