Cada vez que la UC está en búsqueda de un entrenador, su nombre suena inmediatamente. Juvenal Olmos extrañamente es hoy uno de los favoritos de la hinchada cruzada, y en su cuenta de Twitter @JuvenalOlmos recibe constantemente el cariño de los cibernautas, principalmente por su trabajo en medios de comunicación. Una plataforma que el ex DT cruzado y de la selección chilena aprovecha de vez en cuando.
Por ejemplo, tras la caída ante Real Potosí, el DT campeón con la UC en el Torneo Apertura 2002 no dudó en hacerle un ofrecimiento al presidente de Cruzados, donde se ofrece para reemplazar al cuestionado Mario Salas. En un tweet, el ahora comentarista escribió al presidente de Cruzados, Juan Tagle, «Don Juan, usted tiene mi número…..la firma será un apretón de manos, siempre que la obligación sea ser Campeón…usted decide». El ofrecimiento tuvo rápida viralización en redes sociales.
«Es totalmente esperable y se adecúa a lo está sucediendo lo que pasa con el hincha. Somos respetuosos de lo que siente el hincha, porque al hincha le duele esta eliminación, le duele cómo jugó el equipo. Estamos muy dolidos por los sentimientos que se generan después de esta eliminación. Esperamos el domingo, ante Wanderers, encarar el partido con otra actitud. Queremos que el hincha se vaya contento», comentó el cuestionado técnico de los católicos.
Pero la muestra de la poca armonía en el camarín de la precordillera la da el delantero, Nicolás Castillo, cuyo excelente ingreso hacía preguntarse por qué no fue titular anoche en vez de un perdido y errático David Llanos. El goleador sembró las dudas. «Yo estaba para jugar 90 minutos. Son decisiones técnicas (…) esto es un fracaso rotundo, hay que ser hombrecitos», lanzó manifestando su descontento.