La presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos de Chile, Lorena Pizarro, pidió la remoción del jefe del Estado Mayor del Ejército, general Guillermo Castro, quien reconoció haber integrado la policía secreta de la dictadura de Augusto Pinochet.
En una declaración judicial prestada en el marco del secuestro y asesinato de 22 campesinos en la localidad de Paine, al sur de Santiago, perpetrado en octubre de 1973, Castro reconoció que fue agente de la Central Nacional de Informaciones (CNI).
“Si en este país las Fuerzas Armadas fueran instituciones que toman distancia de la dictadura militar, jamás hubiesen permitido que ascendieran sujetos como estos”, declaró Pizarro a radio Cooperativa.
El actual “número dos” del Ejército contó que estuvo en la Escuela de Infantería de San Bernardo, cerca de Santiago, hasta fines de diciembre de 1973, y a principios de 1974 hizo un curso en Panamá.
Ayer, la Subsecretaría de Defensa cesó de sus funciones a tres asesores que participaron de la Dina y la CNI: Alejandro Romero Peragallo, José Pérez Manríquez y Orlando Carter.
La salida de estos funcionarios se produjo, según informó el Ministerio de Defensa, “conforme a la nueva política de personal” de la cartera dispuesta por el ministro Andrés Allamand.
NO PUEDE SEGUIR EN EL CARGO
La abogada de derechos humanos Pamela Pereira, dijo que “hace mucho tiempo que el Ejército debió haber tomado medidas. Estas son las consecuencias”.
Pereira aseguró que, de hecho, existe una lista de oficiales del Ejército que permanecen hasta hoy activos en la institución, y que desde 1973 participaron de organismos de seguridad durante el régimen militar.
La jurista dijo esperar un pronunciamiento de las Fuerzas Armadas y del Ejército al respecto. “Yo espero que el general Fuente-Alba tome las decisiones que correspondan para superar alguna vez estos problemas en el país. Ellos saben que es gente que no puede estar en las instituciones armadas”, sostuvo.
Se agrega a los antecedentes los del general Alejandro Maggi Ducomunn, actual comandante en jefe de la III División del Ejército en Valdivia, quien también fue un agente de la desaparecida Central Nacional de Informaciones (CNI).