¿En qué consiste esta cirugía? Básicamente en un estrechamiento de la vagina, que permite una mayor fricción al tener relaciones, aumentando la sensación de placer para ambas partes.
En general es una operación reconstructiva que debe ser hecha por los ginecólogos, ya que son ellos los que tienen mayor experiencia con la anatomía de la zona, y en ese tipo de operaciones se trabaja a milímetros tanto de la vejiga como del recto, siendo posible provocarles lesiones como perforaciones o fístulas si no se actúa con el debido cuidado.
La cirugía cosmética ginecológica. Hay muchas mujeres a las cuales les puede otorgar un gran beneficio, como por ejemplo a las pacientes que tienen los labios vulvares asimétricos, o prominentes (es frecuente ver mujeres jóvenes que sienten que no pueden usar bikini porque se ve un abultamiento). En estos casos puede hacerse el remodelado de los labios vulvares, ya sea recortándolos o aumentándolos, según la necesidad de la paciente, a lo que se llama labioplastia.
El procedimiento es sencillo, con anestesia local, y el resultado es espectacular. Por supuesto tenemos las mujeres que luego de dar a luz presentan una rotura en los tejidos que sostienen la entrada de la vagina, haciendo que esta se dilate demasiado y que no haya suficiente fricción en la relación sexual, por lo que disminuye el placer durante la misma.
Casos de prolapso. Esta caída de los órganos pélvicos (principalmente útero, vejiga y recto) puede producir una serie de problemas ya no solo estéticos sino también de funcionamiento y salud, como escape de orina al toser, estreñimiento crónico, úlceras, etc.
De los prolapsos, que son un problema bastante común y que ocasiona múltiples molestias a la mujer, hablaremos en otro artículo.
Muchas pacientes nos buscan porque tienen problemas en su matrimonio y piensan que una cirugía de rejuvenecimiento podría solucionarlos. ¡Es un error! La enorme mayoría de problemas en la vida sexual de la pareja tienen otras causas, que pueden ser emocionales, de gustos y/o costumbres diferentes, hormonales, físicos, etc. La operación puede dar muy buenos resultados, pero no debe ser vista como la tabla de salvación de una relación.
Resumiendo, el rejuvenecimiento vaginal es una operación simple y de bajo riesgo, que debe ser hecha por el ginecólogo y que, bien indicada, puede mejorar la calidad de vida de la paciente.