Jack Collins, un niño de cinco años, de Glossop, Derbyshire (Inglaterra), sufrió un incidente con su prenda de baño y casi pierde sus genitales, según un artículo publicado en el diario británico Daily Mirror.
El menor se encontraba con su familia de vacaciones en la playa cuando empezó a sentir una pequeña molestia en la entrepierna, que se convirtió en un fuerte dolor.
La madre del Jack, Laura Collins, trató de quitarle el traje de baño a su hijo para revisarlo, pero fue peor, ya que su pene quedó enredado en la malla, lo que agudizó el dolor.
Jack fue trasladado al hospital, donde los médicos le aplicaron anestesia general para poder retirar el pedazo de malla que había estrangulado su pene.