«Ley Longueira»: Acusan a El Mercurio de favorecer la posición de la industria pesquera

Marcha Condepp

A través de una carta pública, el Consejo Nacional de Defensa del Patrimonio Pesquero (Condepp), público detractor de la cuestionada Ley de Pesca, ha denunciado una «actitud de menoscabo» de El Mercurio respecto a esta organización y una discriminación en favor de otras que apoyan abiertamente la también llamada «Ley Longueira». Una situación, señalan, que «da cuenta de que aún se mantienen viejas prácticas que creíamos obsoletas».

En ese sentido, indican que no han tenido derecho a réplica frente a lo que se expone en el marco de la Ley de Pesca y que, al no ser publicadas ni respondidas, «cada una de las cartas enviadas -nos imaginamos- ha sido desechada sin mayor explicación y nuestras denuncias u opiniones no fueron consideradas».

En segundo término, cuestionan que en los cuatro años de vigencia de la Ley de Pesca «el espacio para las opiniones de Asipes y Sonapesca, ha sido ampliamente cubierto». La primera organización corresponde a la Asociación de Industriales Pesqueros y la segunda a la Sociedad Nacional de Pesca, federación gremial que reúne a los principales gremios y actores de la pesca industrial del país, incluida Asipes.

Foto: Sonapesca

Espaldarazo editorial

Condepp advierte que el espacio a los representantes de la pesca industrial se ha brindado «incluso después de conocidas las graves acusaciones e investigaciones judiciales por financiamiento ilegal de la política que los afecta». Esto, en alusión a que, por ejemplo, Corpesca -empresa del Grupo Angelini investigada por el financiamiento delictivo de la política- es una de las afiliadas a Asipnor, la Asociación de Industriales Pesqueros del Norte, que a su vez forma parte de los gremios socios de Sonapesca.

El malestar en Condepp surge porque, en parte, es precisamente frente a estos hechos de corrupción que la organización se creó, así como también «para impedir que nuestro mar, recursos, cultura, fueran desapareciendo producto de una ley maldita y de la ambición de 7 familias».

En ese sentido, la agrupación critica que el diario de Agustín Edwards legitime en su editorial “Renovación de cuotas individuales de pesca”, del 16 de septiembre pasado, la posición de la industria que ha sido beneficiada con la norma. En el texto, en donde se mencionan los cuestionamientos a la «Ley Longueira», ya sea por favorecer a un reducido grupo de empresas o por estar bajo la lupa debido a la corrupción en la que se habría originado, El Mercurio decide rescatar y relevar los supuestos avances que esta legislación habría significado, acusando de paso «ignorancia» entre quienes la critican.

Extracto editorial de El Mercurio

Espacio al «amedrentamiento»

Junto con ello, Condepp asegura que el diario de Edwards «sigue dando espacio al ‘amedrentamiento’ que la gran industria quiere hacer al Gobierno, a fin de impedir que se les quite el regalo que se les entregó con la norma». Para eso citan una nota del 8 de septiembre de este año en donde se anuncia que el «gremio pesquero del centro-sur advierte que defenderá derechos si cambia renovación de permisos”.

El artículo da cuenta de la reacción justamente de Asipes frente al anuncio del gobierno de poner fin a la renovación automática de los permisos de pesca, a través de un proyecto de ley que impulsaría a fin de este año con el objeto de modificar la Ley de Pesca ante los cuestionamientos. «La Asociación de Industriales Pesqueros estudiará desde el punto de vista legal y económico los delicados alcances de dicha propuesta y hará valer sus argumentos de acuerdo al Estado de Derecho que rige a nuestro país«, señala en el artículo Luis Felipe Moncada, presidente de la organización gremial.

Condepp señala, además, que la desproporcionalidad en la distribución del espacio en el medio se evidencia en que al lado de la nota con la visión de Asipes -y reducida a «un breve anuncio»- aparece la noticia sobre las manifestaciones a nivel nacional que habían realizado el día anterior los pescadores artesanales en contra de la «Ley Longueira».

El Consejo de Defensa del Patrimonio Pesquero advierte igualmente sobre una entrevista a Francisco Orrego, presidente de Sonapesca, quien -dice Condepp- «intenta explicar lo inexplicable». En el texto publicado el miércoles 21 de septiembre, el líder gremial asegura que «si hoy ser empresario es difícil en nuestro país, ser un empresario pesquero es más difícil aún».

Orrego señala también que la legitimidad de la Ley de Pesca aparece en medio de «un cuadro general de cuestionamientos al modelo político y económico del país”. Sin embargo, desde Condepp le responden que son justamente «las denuncias de cohecho y corrupción» las responsables de que hoy no exista credibilidad en el mundo político y empresarial.

Expuesto todo esto, Condepp finaliza su carta sosteniendo que «hablar de corrupción en la política, también es hablar de corrupción en los medios». Y agregan: «Ustedes nos dirán si El Mercurio volvió a viejos artificios que en el pasado tanto daño le hicieron al país; si prima el dinero más que el derecho a informar; si en El Mercurio tienen cabida todas las voces o solo aquellas que pagan avisaje».

«La industria se empezó a colocar la caparazón»

«El problema es que El Mercurio se debe a la gran industria y al poder económico«, dice Nelson Estrada, vicepresidente de Condepp. «Asipes habla en cualquier minuto, cuando quieren», plantea, agregando que algo muy distinto ocurre con los dirigentes de la pesca artesanal a quienes -añade- no se les considera.

Para Estrada todo esto forma parte de una estrategia impulsada desde los grandes gremios de la pesca frente a los eventuales cambios a la llamada»Ley Longueira», empujados por los cuestionamientos que pesan sobre la legislación. «La industria se empezó a colocar la caparazón», señala.

Estrada aprovecha de reiterar su posición frente a la Ley de Pesca, advirtiendo que «nació bajo corrupción, siempre lo hemos dicho». «Pero a eso se le echa tierra», dice el dirigente.

Por Daniel Labbé Yáñez