El experto en lenguaje cuneiforme del Museo Británico, mostró una tableta del tamaño de un teléfono móvil que explica cómo el Arca de Noé fue construida y para sorpresa de todos, “que era de 360 metros cuadrados y paredes de seis metros de altura” describió.
De acuerdo con Finkel descubrimiento de que se necesitaron dos años para descifrar la tableta, las instrucciones fueron que el buque debía ser insumergible y los animales tenían que ir de dos en dos (macho y hembra), según lo establecido por la historia bíblica del arca de Noé.
“Las instrucciones no contradicen la creencia religiosa establecida en el antiguo Testamento “, en el que Dios ordenó al profeta Noé construir un barco para salvar a su familia y varios pares de animales en la gran inundación, dijo durante la presentación de la tableta que se hizo en la antigua Babilonia.
El experto explicó que la historia del barco tiene su origen en Mesopotamia y para demostrarlo se ha convertido en un “detective” con el fin de descifrar las inundaciones en Babilonia y las instrucciones precisas para construir la nave. “Un barco redondo tiene sentido. Ellos fueron ampliamente utilizados por los pescadores en el antiguo Irak, y estaban perfectamente preparados para mantener el equilibrio durante la inundación frenética”
En la escritura cuneiforme, la más antigua en el mundo utilizado por los sumerios y los babilonios, revela que el arca debe ser redonda, con un área del tamaño de un campo de fútbol y reforzada con cientos de kilómetros alrededor de la cuerda tejida. Pero el Arca “nunca se construyó”
De acuerdo con Finkel, para decepción de muchos creyentes en la historia bíblica del Arca de Noé. “Nunca existió” y “Estoy 130 por ciento seguro”, dijo el investigador, “pero esto no contradice ni desecha la historia del Antiguo Testamento, sino que ofrece una nueva comprensión de los orígenes de la gran inundación “.
Una segunda tableta, que data 700 – 500 aC, y los mapas del mundo con ocho triángulos muestra que el destino de la tripulación sería el monte Ararat, el pico más alto de Turquía. En el libro “El arca de No, descifrando la historia de la inundación” Finkel dice que la tableta, pertenecía a un coleccionista privado estaba con él desde 1985, pero sólo en 2011 tuvo la oportunidad de estudiarla.
Vía Infovzla