El cometa 67P, el módulo de aterrizaje Philae y la sonda espacial Rosetta
Los científicos de la Agencia Espacial Europea (ESA) se despidieron hoy de una de las más ambiciosas misiones de la historia: la sonda espacial Rosetta.
La nave pasó dos años explorando todo lo que pudo del cometa 67P/ Churyumov-Gerasimenko, al que estuvo orbitando por ese período, y esta mañana se estrello contra su superficie, en una maniobra controlada para dar la misión por terminada.
La decisión se tomó porque la nave estaba a punto de alejarse demasiado del Sol, lo que le impediría seguir recibiendo energía en sus paneles para comunicarse con la Tierra.
Rosetta alcanzó la superficie del cometa alrededor de las 7:18am (hora Chile) de hoy viernes, luego de descender a paso lento mientras enviaba imágenes y datos durante todo el trayecto, informa The Independent.
El aterrizaje-colisión se confirmó cuando la señal enviada al control en Darmstadt, Alemania, se interrumpió abruptamente, dando una emotiva y oficial conclusión a la misión.
Una de las ilustraciones que la Misión Rosetta estuvo publicando en su Twitter oficial durante las horas de descenso
La cuenta oficial de Twitter, de la Misión Rosetta, estuvo publicando las actualizaciones de toda la jornada, desde anoche, con ilustraciones y una última imagen tomada por la sonda, a 51 meros de su desaparición en la superficie del cometa.
«Eso es todo», dijo Patrick Martin, director de la Misión Rosetta, al momento siguiente del aterrizaje. «Puedo anunciar el total éxito del histórico descenso de Rosetta a 67P y declaro terminadas las operaciones para Rosetta».
La misión de dos años (más un viaje de 10 años para llegar a su lugar) de la sonda espacial al cometa 67P ha sido tremendamente productiva, ahondando como nunca antes en nuestra comprensión sobre la estructura y naturaleza de estas rocas que rondan por el Sistema Solar, publica IFLScience.
«Ha sido una misión muy increíble», señaló el director general de la ESA, Jan Woerner, en momentos previos al aterrizaje, en la página de la agencia espacial.
Rosetta impactó al cometa en una zona de éste llamada Ma’at, que está en su protuberancia más pequeña.
Pero aunque la sonda «pasó a mejor vida», terminando sus funciones para siempre, los científicos de la misión aún tienen trabajo que hacer analizando la gran cantidad de datos entregados por Rosetta. Según el científico Matt Taylor, quien participó en el proyecto, todavía quedan décadas de investigación a partir de lo que se ha obtenido. Hasta ahora se han escrito 672 estudios basados en estos datos y hay más de 50 elaborándose, informa ifls.
El Ciudadano
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