Desde sus tiempos de alcalde de Pirque hasta que saltó a la palestra política como alcalde de Puente Alto, el senador por Santiago Oriente, Manuel José Ossandón Irarrázabal, ha buscado perfilar su carrera política desde la polémica y fuera de los estándares tradicionales de la política. Y en el último tiempo ha profundizado su esmero en este plan, criticando duramente el accionar de Chile Vamos en su rol opositor y con especial «cariño» al expresidente Piñera, de quien dice que «no está por un proyecto país (…) espera marzo para ver si los números le dan, si no le dan se va a bajar».
Se declara de centroderecha a pesar de su renuncia hace unos meses a Renovación Nacional y destaca que el sistema de partidos en Chile es reflejo de «la relación entre dinero y política que quiere que este país siga igual, sólo con maquillaje». Al mismo tiempo, sostiene, respecto de quienes lo tildan de populista, que «si defender a la gente es ser populista, soy populista».
Durante la conversación que sostuvo con El Ciudadano, Ossandón da cuenta de su mirada del contexto político del país, intenta aclarar sus dichos sobre el sexo anal a propósito de la guía de educación sexual dada a conocer por la Municipalidad de Santiago y deja en claro que llegará a la primera vuelta presidencial a toda costa. Todo, envuelto en frases que hacen recordar al Lavín ’99, claro que con más octanaje y contundencia a la hora de hablar.
Usted está en proceso de recolección de firmas. ¿Cómo le ha ido con eso?
Extraordinario, debo estar cerca de las 25 mil, de las 35 mil que se requieren. Estamos cerca, aunque nunca uno está listo hasta que termina.
A propósito de su «salida» respecto del sexo anal. ¿Cómo se define ante los mal llamados «temas valóricos»?
Mira, eso pasó en una conferencia de prensa que iba por otro tema, hasta que una periodista me muestra una foto y me pregunta qué me parece esto. Yo respondo con torpeza que el sexo anal no es sexo, mirándolo desde el punto de vista de la educación sexual; quedó la escoba y ya no podía correrme del tema. Pero lo que quería decir es que con la sexualidad de los niños no se juega, ni de los jóvenes tampoco, porque el Estado debe tener políticas públicas de educación sexual , pero hay un ámbito que corresponde a las familias y donde la autoridad no tiene derecho a meterse a no ser que preguntes. Por ejemplo, en el libro aparece la pregunta si una niña de 6 u 8 años puede quedar embarazada y la respuesta que entrega el libro es un respuesta biológica, cuando eso es un delito en cualquier parte del mundo.
{destacado-1}
¿Pero se define conservador o progresista en esta materia?
Más que conservador o liberal debes actuar según lo que consideres más adecuado para tu hijo, sólo eso. Aquí hay un punto importante que es la responsabilidad de los papás, que es algo irremplazable. ¿Quién se hace cargo de los niños vulnerables? ¿El Estado, que acaba de reconocer que a través de Sename han muerto cientos de niños en sus centros?… Entonces, cada cual debe asumir sus responsabilidades.
¿Y qué propone para rectificar la precaria condición del Servicio?
Chile tiene un montón de temas invisibles, uno de ellos el Sename, cuya problemática viene de varios gobiernos atrás y nadie había dicho nada hasta que muere una niña y se hace público. Entonces, como Presidente lo que yo quiero hacer es visibilizar los temas que son invisibles, para recién generar las soluciones que se requieren.
¿Qué otros temas invisibles ve usted?
Tienes lo relacionado con el adulto mayor, Mapuche… las AFP eran un tema invisible; o me van a decir que nadie sabía que las pensiones eran una miseria hace 10 años atrás. ¿Ricardo Lagos no sabía? Fue tema de su campaña y de las anteriores también. En el caso del Sename, los niños no votan y las familias vulnerables tampoco lo hacen, por tanto era una caja pagadora para ciertos partidos políticos. Entonces, creo que esos temas hay que subirlos a la mesa y discutirlos sobre la base de la realidad, la firme.
Política y Poderes Fácticos
Usted ha hecho una dura crítica a la derecha, y a partir de eso renuncia a RN. ¿Cuál es su mirada del sector, siendo que fueron gobierno hace poco y hoy está por el suelo?
Mi crítica no es para la derecha sino que para la política antigua, esa política donde tanto la derecha como la izquierda tienen una relación perversa con el dinero y ese es el problema. Hay temas que no se tocan, sectores que no se tocan, leyes que han sido redactadas por los gerentes y esa cuestión cruza a todos los sectores. Yo siempre he sido una persona de centroderecha, pero el asunto de derechas e izquierdas se cayó, lo que necesita Chile es gente honrada que le diga la verdad. Ejemplo: las AFP no se pueden eliminar, porque sería un daño muy grande para la economía, pero sí se pueden modificar para que cumplan con su objetivo, que es dar buenas pensiones. Si somos capaces de subir a la mesa los temas de interés y dar soluciones reales, como en el caso de las AFP o de la elección de los intendentes, que son temas de Estado y no de un color político en particular.
¿Usted cree entonces que la discusión se encuentra atada a «contratos invisibles»?
Absolutamente. Hay temas que no se tocan.
¿Cómo se refleja eso en el accionar del Parlamento, donde usted lleva dos años?
Hay gente buena allí, pero hay temas que son tabú que son más peligrosos que la sexualidad. Nadie toca a los bancos, nadie toca a las isapres; Transbank, nadie lo toca… qué raro. Es cada día más difícil hacer algo, porque son temas que nadie pesca y la forma en que está hecha la legislación es jodida. Primero, porque el gobierno da las urgencias según su interés. Por ejemplo, si el gobierno quisiera poner freno al abuso de las isapres tiene todas las herramientas para hacerlo; y segundo, ya en el Congreso -o al menos en el Senado- el presidente de cada comisión es el que la lleva… puedes presentar un proyecto de ley extraordinario pero si no le gusta al presidente de la comisión, éste se pone de acuerdo y el proyecto no avanza.
¿Cómo califica el rol de Chile Vamos en este período?
Un desastre, tan malo como la Nueva Mayoría porque nadie les cree. Cuando tú tienes un gobierno tan malo como este y no lo capitalizas es por algo, pero como ellos están preocupados de otras cosas y nadie quiere hacer crítica a los actos de corrupción… Cuando dices estar en contra de la corrupción y nombras candidatos que fueron formalizados, son absolutamente incoherentes. Además, Chile Vamos está funcionando para que el expresidente Piñera sea candidato, es funcional a eso.
¿Qué Piñera sea candidato es el principal objetivo de su excoalición?
Absolutamente…
¿Se siente desplazado por ellos?
Todo lo contrario, porque me da la libertad de competir. Piñera no va a ser candidato, no va a llegar al final.
¿Por qué cree eso?
Porque sabe que pierde, porque él no está por un proyecto país, está por un proyecto personal. A mí me acusan de personalista pero yo estoy dispuesto a ir a la pelea, él no. Él espera marzo para ver si los números le dan; si no le dan se va a bajar.
Usted está recolectando firmas para llegar a primera vuelta y ya lleva 25 mil en dos meses y medio. ¿No se le ha pasado por la cabeza armar un partido?
No, porque ese no es mi rol. Yo quiero ser presidente para hacer un gobierno transversal, con gente normal y corriente, quiero hacer un gobierno sin los top ni los grandes elegidos que andan por ahí, todos ellos están condicionados por los poderes fácticos. Aquí lo que ha matado a Chile es esta relación perversa entre el dinero y la política.
¿Y qué opinión tiene de los partidos, del sistema de partidos?
Está controlado por la antigua política, la que no quiere cambios. Lo que pasa en Chile es que la relación entre dinero y política quiere que este país siga igual, sólo maquillaje. Por eso ves que los candidatos de los poderes fácticos son Lagos y Piñera.
Presidenciales: Lagos y Piñera en la mira
¿Usted pretende llegar a primera vuelta de la presidencial?
Depende, si no hay garantías en las primarias, que hasta ahora no las hay, por supuesto que llego a primera vuelta.
Si se dan esas garantías de las que habla, ¿se presenta entonces a las primarias?
Hoy como se plantean las primarias no existen garantías. Cuando Chile Vamos plantea que lo primero para ser candidato es que hay que presentar un proyecto, ideas… que es como entrar a la universidad cuando das una prueba antes de pasar por admisión. Esto debe entenderse como una elección democrática y, para ello, lo primero que hay que hacer es demostrar que las personas tienen las manos limpias; segundo, que hayan criticado públicamente los actos de corrupción; y tercero, que demuestren que tengan capacidad de competir. Yo quiero ser súper respetuoso, pero si estoy eligiendo un candidato para que corra la maratón y llega una persona con un lindo uniforme pero que no está capacitado le digo «tu carrera no es la maratón». Aquí hay muchas personas que se las dan de candidatos y que usan esta cuestión con miras a una senatorial o para tratar de negociar ser ministro u otras cosas, eso es poco serio.
{destacado-2}
De no haber primarias, ¿cómo ve el escenario de primera vuelta?
Yo le gano al representante de Chile Vamos si se da este escenario, y ojalá que sea Piñera para demostrarles que la política antigua se acabó.
Usted dice de Piñera que viste y habla como candidato. Recién dijo usted que había que tener las manos limpias. ¿Usted cree que las tiene sucias?
Hay que decir otra cosa, que Piñera hace propuestas en modo candidato, pero no es candidato aún… muy al estilo de la política antigua, mentira tras mentira. Ahora, yo no soy fiscal para juzgar, pero sí creo que Piñera no va a ser candidato, no va a llegar al final porque sabe que yo lo gano.
¿Cómo califica la labor de Piñera como presidente?
Piñera no fue un mal presidente, pero políticamente fue nefasto. Él se encargó de destruir el sector. Cuando uno es presidente y no es capaz de proyectar su obra es un fracaso. En comparación con este gobierno, fue cien veces mejor.
¿Y el gobierno de Lagos?
Lagos también fue un buen presidente, pero tiene muchas cosas que responder, al igual que Piñera.
¿Como cuáles?
Corrupción, MOP-GATE, Transantiago, lo que pasó con el tren al sur. Me parece impresentable que un expresidente hable del Transantiago, que es la política pública más mala que hemos tenido en el último siglo y que ha costado billones de pesos, como un error de planificación y que nadie le pregunte nada más. Perdóname poh, uno debe responder por sus actos. Piñera tiene lo suyo también… por eso creo que es muy difícil que ambos lleguen a ser candidatos porque tienen mucho que responder. Yo voy con la verdad, soy un cara de palo y tengo cojones para enfrentar los problemas.
¿Usted cree que sus interpelaciones a Piñera serán alguna vez respondidas?
Cuando estemos en campaña cada uno pondrá sus temas y por supuesto que pondré los que él quiere evitar.
¿Y cree que el sector se va a cuadrar con su figura luego de la crítica que usted ha realizado a la acción del sector y a Piñera?
Destaquemos que yo he hecho una crítica a la política chilena y los que se sientan afectados que se pongan el sombrero. Me parece inviable que quien quiera gobernar Chile sea incapaz de gobernar los actos posibles de corrupción y que respondan. Por ejemplo, Marco Enríquez está metido en forro que le va a costar salir, lo están midiendo con un vara, mientras que a Piñera, Lagos, Bachelet o Frei no los tocan… es increíble.
¿Qué opina de Guillier?
Es una buena persona.
¿Siente que la élite los ve como un peligro?
Somos un peligro, no hablo por Guillier… yo soy un peligro para ellos. Los poderes fácticos con los grandes medios de comunicación han tratado de borrarme porque tienen miedo al cambio y están equivocados. Chile es inviable sin realizar cambios, y si no se realizan cambios profundos vamos a terminar mal. Y estos son: hacer de Chile un país más humano y solidario, que los gallos que abusen se van a la cárcel, que hay una responsabilidad social y que no todo es ganar plata. Cuando escuchas a la gente cercana a las fundaciones de los expresidentes todo se lleva hacia el crecimiento económico. No todo es plata.
¿Cómo ve a Lagos y Piñera, como líderes o como personajes autoritarios?
Los veo como la vieja política, su tiempo ya pasó. Ellos no han entendido que Chile cambió y que su forma de hacer política no sirve para estos tiempos.
{destacado-3}
Populismo y Nueva Constitución
Los escuderos de Lagos y Piñera los tildan a ustedes, junto con Guillier, de populistas .¿Qué opinión tiene del populismo?
Es el típico vocablo que usan las personas cuando se sienten que están pilladas o agredidas.
¿Pero se siente cercano o alejado del populismo?
A mí me han tratado de populista, pero por ejemplo yo fui alcalde de Puente Alto y dejé una comuna top y financiada. Un populista se gasta todo lo que tiene y promete cosas que no cumple. Como he sido muy duro con los poderes fácticos, una forma de descalificarme es decir que yo soy populista, eso me dijeron cuando era candidato a senador y dije que la derecha estaba capturada por los poderes económicos. ¿No era cierto acaso? ¿Qué era Penta? Lo que pasa es que no sabía que la Nueva Mayoría también tenía lo suyo y que el yerno de Pinochet los había financiado a todos. ¿Era populista o verdad lo que estaba diciendo? Ahora, si defender a la gente es ser populista, soy populista.
Usted habla de cambios profundos. ¿Uno de ellos puede ser la una Nueva Constitución a través de una Asamblea Constituyente?
Puede ser, pero el problema de la Constitución es que la Presidenta nunca ha dicho por qué la quiere cambiar. El líder de ellos y candidato presidencial, Ricardo Lagos, dijo cuando firma la Constitución en 2005 que «ahí una constitución democrática para estos días».
¿Usted cree que se tiene que cambiar la Constitución?
Yo creo que la Constitución es perfectible, pero hay que ponerse de acuerdo por qué y en qué. Hay muchas cosas que he presentado en cambiar, como la reelección de los parlamentarios o que pierdan el puesto los parlamentarios. Se pueden hacer muchas cosas, a través de un proceso informado y que no sea eterno, porque sino nadie vendrá a invertir a Chile.
¿Qué opinión tiene del Proceso Constituyente?
Creo que fui el único de derecha que lo apoyó, pero fue un desastre. Fue poca gente, gastaron plata destinada a seguridad, fue un verdadero tongo.
Una tú, una yo
Congreso: Difícil, porque hay gente muy dispersa en un lugar muy reducido. Hay una distancia de la realidad por las presiones, es muy diferente ser parlamentario de gobierno, que pareciera que recibe órdenes, y el de oposición, que sólo cree que hay que criticar y tirar mierda al del frente.
Piñera: Un empresario.
Lagos: Gran político que cumplió su etapa.
Bachelet: La estrella caída
UDI: Un partido político.
RN: Otro partido político. Eso sí, nunca fue una secta religiosa, yo podía disentir.
Ejes programáticos: Un país humano y solidario, con crecimiento económico pero para todos.
Chile Vamos: Hasta el nombre está al revés, es un conglomerado pegado con plasticina, pensado en una sola persona.
Asamblea Constituyente: No tengo ningún problema con la AC, pero creo que este país no está preparado para ella.
José Robredo H.
@joserobredo
El Ciudadano