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No, Pinochet sigue muerto

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Autor: Wari

No, Pinochet sigue muerto. No ha resucitado, a dios gracias. El titular no es ingenioso ni mucho menos original. Hay un tango que comienza así: “Matos Rodríguez no ha muerto, comienza a vivir ahora…”. También es la adaptación de una movida que tiene por nombre “franconohamuerto”. Esta iniciativa creada por ciudadanos españoles es una muestra de rechazo a la inhabilitación del juez Garzón, que será juzgado por el Tribunal Supremo español por haber indagado sobre los crímenes de la Guerra Civil (1936-39) y de la dictadura (1936-75), pasando a llevar una ley de amnistía.

El sitio web www.franconohamuerto.com entrega información sobre los abusos cometidos por el franquismo y los casos investigados por el juez Garzón. La idea es mostrar que existe justicia y que es necesario darle a conocer a las nuevas generaciones las vejaciones que sufrieron sus antepasados. Reivindicar la memoria histórica y la justicia, para impedir que las violaciones a la condición humana vuelvan a ocurrir.

A los chilenos nos gusta copiarle a los españoles. Así lo demuestran los reality-show y los programas faranduleros. Nos sometemos a su banca usurera y aceptamos sus voraces tasas de interés. Compramos sus trenes, toleramos que sus call-center ignoren la legislación laboral, esa que defienden con dientes y muelas en su propio país. Queremos alcanzar su PIB. Imitamos la moda madrileña. Soñamos con jugar como el Barcelona. Por qué no. De ahí que sugiera crear www.pinochetnohamuerto.cl, un sitio en Internet que muestre los crímenes de la era Pinochet y sus esbirros civiles, que hoy posan de demócratas. Un sitio que le informe a las jóvenes generaciones que no hace mucho se mataba y torturaba a personas de pensamiento diferente. Un lugar de testimonio, donde ex presos políticos cuenten que se despiertan por las noches a gritos, recordando las torturas, sin poder sacar de su inconsciente el olor a su piel quemada por el cigarrillo de los “leales” al régimen, el dolor en los genitales por las descargas eléctricas, las ratas hambrientas. Un sitio en donde los familiares de los detenidos desaparecidos compartan informaciones y vivencias. Donde relaten uno de sus sueños: Que por la puerta de sus casas entra su padre, su hermano o su hijo. Un sitio donde aliviar el insomnio del diario vivir. Un sitio donde enterrar los cuerpos de los miles de desaparecidos, para poder hacer el duelo, para dormir en paz, descansar al fin.

Tal vez podría ser más que eso. Un diario digital por ejemplo. Una plataforma que muestre los rastros del dictador, que como mojones renuentes no terminan de irse por la cloaca. Un sitio de informaciones, que ponga en evidencia que la dictadura acabó con la clase política de este país, y la que no pudo o no quiso matar la compró. Para poblar esto de empresarios-políticos, o políticos-empresarios, tipos que deciden por todos los chilenos, sin consultarles nada. Tipos sin vocación, como no fuese la de la servidumbre.

www.pinochetnohamuerto.com, un sitio que muestre que la Constitución que nos rige es autoritaria y discriminatoria. Un sitio que diga que la Concertación negoció una salida espuria a cambio de poder. De poder entrar en la repartija de lo que quedaba. Un sitio que ofrezca, simplemente, una alternativa a la desinformación del duopolio de prensa que disimula la verdad. Un sitio para informar a los chilenos subyugados por la nula alternativa mediática, aburridos de ver el sensacionalismo basura en los canales de la TV chilena. Chilenos que carecen de la opción de leer un cotidiano de otra tendencia. Porque si algo hicieron bien Pinochet, Enrique Correa y Eugenio Tironi, fue comprender que el dueño de los medios de comunicación es el dueño de los mensajes, de la información, de la “verdad”.

www.pinochetnohamuerto.com ¿Qué le parece?

Por Carlos Philippe

Periodista (Paiz)

Polítika, febrero 2011

El Ciudadano Nº96


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