Bachelet le pone freno de mano a las reformas: “En esta etapa necesitamos mucho orden”

A primera hora de este miércoles, la Presidenta Bachelet acudió al Encuentro Nacional de la Empresa – Enade 2016, para hacer una suerte de “cuenta pública” frente a los peces gordos del empresariado nacional.

En su discurso planteó dos ideas fuertes: la primera relacionada con la necesidad de cambios que experimenta Chile y la segunda consistió en acotar el campo de maniobra de su gobierno de cara al próximo año.

En relación al primer punto, Bachelet sostuvo que «vivimos momentos de cambios, en Chile y en el mundo. Por cierto en la economía, pero más aún en la vida social y en la relación de las personas con las instituciones. Por eso me cuesta creer que alguien todavía ponga en duda que nuestra sociedad ha cambiado y que eso renueva nuestros desafíos y que el costo de no elaborar respuestas adecuadas y a tiempo será cada vez más alto».

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En este sentido, la mandataria planteó que «sin cohesión social y legitimidad del marco institucional, los esfuerzos de desarrollo se diluyen. Nuestra reciente clasificación como el país con mayor desigualad de la OCDE es prueba de que las brechas que dividen a Chile siguen siendo muy profundas. Además de ser una fuente frustración cotidiana para las personas, esto afecta los cimientos de nuestra gobernabilidad».

Sin embargo, su discurso llegó a un punto que evidencia un frenazo al impulso reformista que se autoatribuyó la Nueva Mayoría cuando asumió el gobierno el 2014. “Reconozco que somos un gobierno que ha sido ambicioso por el horizonte al que apunta y por la simultaneidad de las reformas. Nos tocó enfrentar un escenario adverso, pero nunca hemos perdido de vista el objetivo central: crear condiciones para un nuevo Chile, cuando el desarrollo económico es indisociable del desarrollo político y social», declaró la Presidenta.

Si bien detalló que las prioridades para el último año de su mandato estarán centradas en educación, seguridad ciudadana, acceso a la salud y economía (¿y las pensiones?), le puso el freno a cualquier tema que pueda surgir de aquí a marzo de 2018.

«En esta etapa necesitamos mucho orden, con prioridades muy claras, para que podamos concentrar nuestros esfuerzos en metas alcanzables y facilitar el trabajo conjunto en torno a objetivos compartidos. Esto pasa por una agenda legislativa realista y pertinente, pero también por evitar la dispersión de esfuerzo y mejorar la gestión»