Antes de convertirse en Madonna la reina del pop era una linda y alocada chica que vivia en un minipiso de Manhattan.
Faltaba solo un mes para que lanzara su primer álbum. Hasta entonces solo cantaba algunos clubs. Madonna, entonces Veronica Louise Ciccone, había llegado a la ciudad desde Michigan con solo 35 dólares.
Se ganaba la vida cantando y bailando en los clubs del Soho y, a veces, también servía copas. En una de sus actuaciones, un jefazo de Sire Records apostó por ella: firmaron un contrato para un disco por 5.000 dólares. El viernes 17 de junio de 1983 quedaban 30 días para que se lanzara su primer trabajo, con tres singles que cambiaron la historia de la música para siempre: Holiday y Bordeline
Esta era Madonna cuando faltaba apenas un mes para que la ‘bomba Madonna’ estallara en todo el mundo:
Las fotos fueron tomadas por el Fotografo Richard Corman en el apartamento del hermano de Madonna Chistopher, con una cámara Polaroid XS.
Con información de Vogue España.