Un hombre polaco de 32 años llamado Piotr, quien nació sin su mano izquierda, ha recibido un trasplante de un donante, en lo que los médicos han descrito como un procedimiento pionero. Antes de habían realizado trasplantes de manos, pero sólo en personas que habían perdido una de ellas en algún accidente, no por haber nacido con alguna malformación congénita.
Durante una jornada de 13 horas, doctores de la Universidad Médica de Breslavia conectaron la mano de un donante fallecido a la muñeca de Piotr, uniendo sus huesos con tornillos y placas de titanio y conectando intrincadamente sus músculos, tendones, nervios y vasos sanguíneos.
Adam Domanasiewicz, quien encabezó la cirugía, dijo que el procedimiento marca un «importante avance en neurocirugía y en la práctica de trasplantes, porque hasta ahora se pensaba que injertos como éstos no eran posibles en el caso de defectos congénitos».
Aunque la mano del donante no ha sido rechazada por el organismo del receptor, él todavía no puede usarla con toda normalidad. Hasta el momento, Piotr sólo puede mover los dedos, pero el equipo a cargo de la operación y la recuperación tiene buenas expectativas de que con el tiempo, el paciente gane más control y destreza y sea capaz de sentir calor, fío y otras sensaciones.
Por IFLScience
El Ciudadano