El grupo terrorista autodenominado Estado Islámico (Daesh en árabe), asumió la autoría del atentado en el que murieron 39 personas y otras 69 resultaron heridas en la discoteca Reina de la ciudad turca Estambul, durante Año Nuevo.
En un comunicado difundido a través de internet, Daesh afirmó que el autor de la matanza, que sigue huido, es un «heroico soldado del califato» autoproclamado por la organización yihadista.
«Que el Gobierno apóstata de Turquía sepa que la sangre de los musulmanes que se está derramando por los bombardeos de sus aviones va a convertirse en fuego en su propia casa», se indica en el texto del grupo terrorista.
La referencia de la organización, es a los bombardeos que el Gobierno turco lleva a cabo en territorio sirio desde hace varias semanas, por lo cual desarrolló la «venganza» contra la nación otomana, «servidor de la Cruz».
Daesh detalló que el terrorista usó granadas y una ametralladora, además, aseveró que las víctimas (entre muertos y heridos) fue de 150, a diferencia de los 108 que informaron las autoridades turcas.