Ni los descuentos por planilla ni la repercusión mediática impidieron que por segunda vez en una semana la falta de quórum se hiciera presente en el Congreso.
Las excusas abundaron: trabajo de comisión, permisos por viaje, audiencia con ministros, labores distritales. Si bien hay muchos que llegan, asisten y después no votan, varios honorables coinciden con que urge buscar todos los mecanismos para que efectivamente la labor parlamentaria se cumpla.
No obstante, estos hechos han ayudado al ejercicio de hacer cada vez más transparente el trabajo parlamentario. Siempre habrán materias que se pueden corregir, la mesa está tomando decisiones para que estos hechos no se produzcan y la voluntad de cambio es transversal: desde el diputado Andrade, pasando por Browne, Espinoza y Cariola coinciden en estos aspectos.
“Las explicaciones agravan la falta. Cada uno tiene que hacerse responsable cuando está y cuando no. Evidentemente, tenemos un problema de funcionamiento. Existen comisiones en funcionamiento paralelo a la sala y eso hace que afecte el quórum. Yo estaba en comisión deportes, que estaba funcionando, y se produce esa disyuntiva entre estar en comisión o en sala. Se dice, y coincido, que la suma de diputados en sala más los de la comisión tampoco dan un número significativo, por lo tanto creo que nosotros mismos tenemos que entender, de una vez por todas, que hay que hacerse cargo de la situación y dar los quórum para que la sala pueda funcionar de buena manera”, señaló el diputado de Amplitud, Pedro Browne.
Por su parte, la diputada Karol Cariola (PC) señaló que “yo no le quiero bajar el perfil pero creo que hay que buscar mecanismos para retener a los parlamentarios en la sala, estoy convencida de eso y creo que debiésemos estar más presentes. También hay que considerar, por ejemplo, que en estos momentos estoy dando un punto de prensa; tenemos que comunicar hacia afuera pero puede ser que en mi salida se disminuya el quórum mientras hay otros parlamentarios en comisiones. Por eso, tenemos que tomar medidas: o no hay comisiones paralelas a la sala, se rebaja el quórum o se buscan los mecanismos para que los parlamentarios estén presentes».
La congresista agregó que «hay un problema con la asistencia de los parlamentarios, sobre todo los días jueves, donde hay situaciones dramáticas, no llegan todos. Los parlamentarios tienen que venir a cumplir con una de sus tres labores: legislar, fiscalizar y representar. Hay que tomar medidas para que eso no ocurra y no sigan fracasando las comisiones. Pero no se puede encasillar a todos en el mismo saco, diciendo que poco menos venimos a dormir y a descansar”.
Así las cosas, varias propuestas se barajan: retomar los días jueves en la tarde de comisión, por ejemplo. Los lunes, de manera natural, se han transformado en legislativos pues sesionan las comisiones de salud, las investigadoras y otro tipo de reuniones, como la de coordinación en La Moneda con SEGPRES. Por mientras, la mesa (administrada por la Corporación) fijará el funcionamiento y asistencia de los parlamentarios a cada una de las obligaciones. Hasta nuevo aviso.