A medida que nos hacemos mayores empezamos a valorar cosas distintas. Lo que antes nos emocionaba deja de hacerlo, cambiamos nuestros gustos y, generalmente, acabamos valorando las cosas materiales por encima por sobre cosas más importantes.
Esto es normal. Conseguir esas cosas implica un esfuerzo que cuando somos pequeños no tenemos que hacer, y empezamos a adquirir cosas que sentimos que nos pertenecen.
Sin embargo, muchas veces acabamos olvidando lo que de verdad importa. Este experimento social nos hace recordar el valor real de las cosas, y a más de uno le removerá por dentro y le hará reflexionar.
Las personas que aparecen en este vídeo no se conocen entre sí, y fueron seleccionados de forma aleatoria, sin saber qué tenían que hacer. Tampoco hay un guion preestablecido, simplemente tienen que contestar a las preguntas que les plantean.
Los invitamos a ver este hermoso y conmovedor experimento social: