Hoy, científicos de la NASA anunciaron que por fin han encontrado todo un sistema solar con 7 planetas que se parecen a la Tierra. Entre ellos, al menos tres podrían ser habitables. El sistema planetario orbita alrededor de la estrella TRAPPIST-1, una enana a 39,13 años luz en la constelación de Acuario.
El anuncio se realizó esta tarde a la 1 pm, hora de Nueva York (15:00 horas de Chile), y se transmitió en vivo vía Internet por el canal NasaTV, del sitio oficial de la agencia. Los investigadores afirman que esta es «la mejor posibilidad de encontrar vida extraterrestre hasta ahora».
El hallazgo se logró a través del telescopio espacial Spitzer, de la NASA, con apoyo de los telescopios TRAPPIST-South y VLT, que se encuentran en el norte de Chile bajo administración del Observatorio Austral Europeo (ESO).
Para los astrónomos y científicos planetarios, los exoplanetas –que no pertenecen a nuestro Sistema Solar– representan la mayor esperanza de encontrar vida fuera de la Tierra, puesto que muchos de ellos han mostrado una variedad de similitudes orgánicas con nuestro mundo, las que podrían constituir una base para la formación de vida.
Se cree que seis de los siete planetas del nuevo sistema, los que se encuentran más al interior, son rocosos como la Tierra. Nunca antes se había encontrado un sistema solar con tantos planetas rocosos de tamaño similar al nuestro y con las condiciones necesarias para albergar alguna forma de vida alienígena, o susceptibles de ser habitados. Los científicos dicen que la probabilidad de cualquier evidencia de vida es «fuerte, muy fuerte o concluyente».
Los siete exoplanetas, llamados TRAPPIST-1b, c, d, e, f, g y h, reúnen una serie de características que podrían potenciar la creación de vida, por su tamaño y distancia son su estrella y por la composición orgánica que se les presume.
Entre todo el sistema hay especialmente tres planetas (d, e y f)que son muy similares a la Tierra. Los científicos seguirán estudiándolos para conformar si estos mundos tienen agua líquida; una condición fundamental para soportar la creación de vida. «Esperamos saber si hay vida allá dentro de la próxima década», señaló el Dr. Amaury Triaud, del Instituto de Astronomía de Cambridge, al medio The Independent.
Como informa ESO, el ‘Telescopio Europeo Extremadamente Grande’ (E-ELT por su nombre en inglés, European Extremely Large Telescope), ubicado en el desierto de Atacama, Chile, será capaz de observar y detectar si efectivamente alguno de estos planetas contiene algún océano o agua líquida.
Uno de los tres planetas estudiados en la llamada ‘zona habitable’ es TRAPPIST 1f, el que los científicos han imaginado con una superficie y paisaje más o menos como en la imagen de abajo. Trappist 1f estaría muy cerca de los otros dos planetas con mayores posibilidades de habitabilidad, y los investigadores explican que de ser posible estar en él, sus vecinos se verían se manera similar a como vemos la Luna desde la Tierra.
El equipo de la NASA encargado de revelar el descubrimiento estuvo conformado por Thomas Zurbuchen (del Science Mission Directorate de la NASA), Michael Gillon (astrónomoo en la Universidad de Liege en Bélgica), Sean Carey (director del Spitzer Science Center de la NASA), Nikole Lewis (astrónoma en el Space Telescope Science Institute en Baltimore) y Sara Seager (profesora de ciencias planetarias del MIT).
Los investigadores llevan 14 años estudiando un posible sistema habitable en relación a la estrella TRAPPIST 1, y ahora finalmente han podido observar que estos exoplanetas podrían tener las condiciones para ser habitables. «Con este impresionante sistema, sabemos que puede haber más», comenta Triaud.
Los astrónomos y científicos planetarios comenzaron a estudiar exoplanetas hace 20 años. El primero, Dimidio (ex 51 Pegasi b), fue hallado en 1995. Desde entonces se han encontrado cientos, pero hasta ahora no se había constatado ninguno en en zonas habitables y con estas impresionantes características. Ahora no solo es uno, sino tres, y los otros cuatro del sistema TRAPPIST 1 también ofrecen posibilidades a estudiar.
Como señalaron los investigadores en la rueda de prensa de esta tarde, estamos dando un paso hacia responder la pregunta de si estamos solos. «Este descubrimiento podría ser una importante pieza en el puzzle de encontrar ambientes habitables, lugares que conducen a la vida», señaló Thomas Zurbuchen, administrador asociado del Science Mission Directorate de la Agencia en Washington.
«Todavía hay muchas cosas que no sabemos, pero también hay muchas más que podemos descubrir y preguntas que debemos responder. Ahora podemos imaginar estos mundos y nos volvemos a preguntar si realmente estamos solos», agregó.
«La naturaleza es mas sabia que nosotros, y si hay probabilidades de que haya vida, creemos que la habrá», señaló Sara Seager, astrónoma del MIT (Massachusetts Institute of Technology), quien también participa en la investigación.
Durante la conferencia el público general hizo preguntas a través de las redes sociales usando el hashtag #AskNasa y una vez finalizada, la agencia ha mantenido una sesión de AMA (Ask Me Anything/pregúntame lo que sea) en el sitio Reddit.
El sistema exoplanetario TRAPPIST 1 lleva este nombre porque a través del telescopio TRAPPIST (Telescopio Pequeño para Planetas en Tránsito y Planetesimales) en el Observatorio de La Silla, en el desierto de Atacama, Chile, se observaron por primera vez tres planetas cercanos a la estrella del mismo nombre. Aquel hallazgo fue en mayo de 2016.
El Ciudadano