El Borussia Dortmund sintió el impacto. El atentado del martes contra el micro que trasladaba a sus jugadores, sin dudas condicionó al equipo para lo que fue, esta tarde, el partido de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones. En Alemania, el Mónaco se impuso por 3-2 y quedó muy bien parado para la serie que continuará el próximo miércoles, en el Principado.
El equipo alemán, que no pudo contar con el español Bartra, lesionado por el explosivo que estalló cerca del ómnibus que trasladaba ayer al plantel del conjunto alemán, comenzó mal y su rival lo aprovechó. A los 19 minutos, Kylian Mbappé marcó, en offside, y puso el 1-0 apenas un par de minutos después de que su compañero Fabinho desviara un penal.
Mónaco llegaría al segundo también antes del final del primer tiempo. A los 35, Bender quiso despejar un centro desde la izquierda y la metió de palomita dentro de su propio arco. Con la ventaja, el visitante salió a jugar el segundo tiempo pensando en aguantar el resultado. Pero el Dortmund tenía otro plan. A los 12, Dembelé empujó la pelota con el arco libre y descontó para las los alemanes, que irían por más.
Pero cuando el dominio era total y el Mónaco buscaba alguna contra, la defensa local se equivocó, Mbappé robó la pelota en mitad de la cancha y sin titubear, mano a mano con el arquero, colocó la pelota en el ángulo derecho. Finalmente, el Borussia llegaría al descuento para mantener viva la serie. Fue a los 40, por obra del japonés Kagawa y una linda maniobra dentro del área.