1.- ANTECEDENTES
La Dictadura Militar y los Gobiernos de la Concertación, decidieron que la educación ya no era más un derecho, y la transformaron en un negociado al servicio del lucro que hoy se traduce en una crisis profunda propia del modelo neoliberal impuesto y en beneficio de las clases más acomodadas para acceder a una educación de calidad:
a) Municipalizaron lo que debió ser un deber del Estado.
b) Dieron facilidades a los empresarios para invertir en educación.
c) Los Estudiantes egresados del sistema educacional engrosaron las filas de la cesantía y se transformaron en mano de obra barata del Modelo Neoliberal.
d) Los Profesores perdieron derechos laborales, fueron atomizados en su organización gremial y están cruzados por el desmedro profesional y la inestabilidad laboral propias del sistema capitalista.
El Estado se marginó en su responsabilidad de invertir los recursos que realmente necesitan los estudiantes y profesores de este país, sobre todo en aquellas franjas más pobres y marginadas de esta sociedad, convirtiendo en verdaderos ghettos los colegios municipales acentuando la discriminación en la periferia y provincias de nuestro país. Y con ello, de paso, el Estado Opresor se limpia las manos entregando el dinero de todos los chilenos al servicio de los negociados de los grandes grupos monopólicos financieros nacionales y extranjeros como al financiamiento de las Fuerzas Armadas que son el sostén represor de esta democracia burguesa de la clase patronal.
El “Pingüinazo” en el 2006, fue una respuesta clasista de los estudiantes secundarios desde el campo popular en contra de la ambición de los gobiernos de la Concertación y la Derecha, que apoyaron sin tapujos las prácticas de los grandes empresarios. Gobiernos cuyos ministros de educación tienen intereses comprometidos al ser empresarios y dueños de colegios, universidades y corporaciones de los que no se salvan muchos parlamentarios y politiqueros de estos dos conglomerados.
Hoy en día la derecha patronal en el Gobierno quiere ir más allá, y terminar de privatizar toda la educación y seguir menoscabando la labor docente:
* Le entregaron en bandeja el negocio a los bancos para cobrar indiscriminadamente a los estudiantes el triple de lo que cuesta la inversión familiar en educación; y además, el Estado Opresor les compra la deuda, es decir, el Estado gasta el 40% de su presupuesto en educación para dárselas a la banca privada y juega con el esfuerzo de miles de familias cobrando aranceles millonarios en las casas de educación superior, lucrando desvergonzadamente con la mayoría estudiantil más pobre en los Centros de Formación Técnica, Institutos Profesionales y Universidades privadas por medio de créditos con intereses exageradamente altos que ni siquiera se dan en los mal llamados países desarrollados.
* Dieron facilidades a los sostenedores de la educación para aumentar la subvención escolar y seguir engrosando su lucro, permitirles sistemas de evaluación local al margen del Mineduc que por lo general se han traducido en elementos técnicos de carácter represivo, modificaciones al Estatuto Docente para que los empleadores puedan despedir al 5% de la planta docente y abrir posibilidades concretas para que profesionales no ligados a la carrera pedagógica ocupen los cargos propios del profesorado en reemplazo de los verdaderos profesionales de la educación.
Los estudiantes y profesores están atrapados en las garras del Modelo Neoliberal y de la clase empresarial que gobierna este país. De los cuales el Presidente Piñera es uno de sus más destacados representantes, y su ministro de Educación, Joaquín Lavín no pasa desapercibido al ser, por ejemplo, uno de los prósperos accionistas de la Universidad del Desarrollo.
2.- NUESTRA LUCHA ES DESDE EL CAMPO POPULAR Y DE LOS TRABAJADORES:
La movilización popular entorno a una educación clasista al servicio de los trabajadores no debe confundirse con la conducción economicista y mercantilista que hoy le imprime el pacto de largo alcance Concertación-Partido Comunista a través de la dirigencia de la Confech, la CUT y el Colegio de Profesores, pues no se trata sólo de exigir más becas, más créditos, más bonos o mejores sueldos. Sino de provocar cambios radicales en el sistema de dominación que guíen estratégicamente el camino de nuestra lucha política, social y revolucionaria hacia un Estado de carácter socialista que se haga cargo realmente de la educación chilena.
Es en este sentido que el mundo ligado a la educación debe expresarse radicalmente en todas sus instancias contra el modelo de dominación capitalista y de paso separar aguas de aquellos conciliadores y oportunistas que hoy pretenden canalizar las luchas legítimas e inconclusas de nuestro pueblo.
Hoy, el problema no resuelto de los gobiernos de la Concertación y ahora la Derecha en el poder, obliga nuevamente a los estudiantes y profesores a exigir una solución real al servicio de una educación pública de calidad. Es en ese sentido que la Coordinadora de Organizaciones Populares (COP) da su fervor su apoyo a las luchas estudiantiles y del magisterio haciendo un llamado sobre todo a los estudiantes secundarios a no dejarse amedrentar por los directores, inspectores, orientadores, jefes de UTP, profesores jefes, y profesores asesores que interfieren bajándoles el perfil a las decisiones de lucha de los estudiantes que es por lo demás la misma lucha de todos los padres de familia, organizaciones sindicales, poblacionales y trabajadores en general.
COMPROMETIDOS CON LA LUCHA POPULAR A MOVILIZARSE ENTORNO A LAS MARCHAS, TOMAS DE COLEGIOS Y UNIVERSIDADES EXIGIENDO EL FIN AL LUCRO, POR UNA EDUCACIÓN CLASISTA, ESTATAL, GRATUITA AL SERVICIO DE LOS TRABAJADORES
JUNIO / 2011
Texto de autoría externa. Recibido y publicado por