El hecho sucedió en la parroquia de Santa Ana en Jalisco (México) durante la celebración de la misa de las Siete Palabras, en Semana Santa. Apenas pocos días después el feligrés detrás de un presunto video ha hecho público su hallazgo, desatando toda clase de opiniones.
La estatua de Jesucristo que permanece recostada en una vitrina de cristal se saca dos veces al año para ser colgada en la cruz: en abril, para la Semana Santa, y en noviembre, para el Día de los Muertos.
Pero durante una grabación -que, según dicen, fue justo a las tres de la tarde- la estatua de Jesucristo por algún motivo sí movió la cabeza…
Inmediatamente los creyentes calificaron la situación como un completo milagro.
“Algo ha de querer con nosotros, o algo nos querrá decir”
-dijo Estela Gómez, una creyente que habló con el programa Primer Impacto.-
El párroco de la iglesia también tiene su versión, pero a pesar de que el video es contundente, él prefiere no llamar el hecho “un milagro”.
“Quiero hablar más bien de una acción bonita que se dio justamente en el momento de la última palabra: ese movimiento”.
-dijo el párroco Juan Antonio Guerra Lule.-
Y no lo llama precisamente un milagro, porque la cabeza (que según dicen, tiene 300 años de antigüedad) al igual que el resto de las extremidades, se sostiene por unas cuerdas de cuero. Y la hipótesis más probable, es que estas cuerdas hubieran cedido.
Pero el párroco también admite que nunca antes estos amarres habían provocado que la cabeza de Jesucristo, se moviera.
¿Crees que se trate de una intervención divina o es una simple casualidad?
VÍA UPSOCL