Conoce a Blanca Suárez, la «Chica del Cable» que ha revolucionado Netflix

Blanca Suárez: «Las Chicas del Cable nos recuerda que tenemos que seguir luchando»

«No éramos libres, pero soñábamos con serlo». Las Chicas del Cable llegan a Netflix como la primera serie española producida por el popular servicio de streaming haciendo gala de un marcado espirítu feminista pero exhibiendo muchas más fortalezas. Un «melodrama romántico con toques de humor», tal y como lo definen sus protagonistas, que han presentado la serie en Madrid.

Este viernes 28 de abril se estrenó a nivel mundial la primera serie original española producida por Netflix en colaboración con Bambú Producciones. ‘Las chicas del cable‘ pretenden ser una revolución como en su día lo fue la llegada del teléfono, el punto de unión de cinco mujeres con una historia detrás que irán poco a poco dando a conocer al espectador.

Entre ellas está Blanca Suárez. La actriz se mete en la piel de Lidia Aguilar, una joven que llega a la compañía con segundas intenciones y muchos secretos pero que pronto se unirá a esa dinámica y ese compañerismo y unión que hay entre todas las chicas que trabajan allí.

«Son cinco mujeres contando con Ana Polvorosa -la jefa de las chicas del cable- muy diferentes entre sí, con procedencias y presentes muy diferentes, pero a las que al finales les acaba uniendo lo mismo: la amistad, el ser independientes, libres,.. Lidia llega a la compañía con otras intenciones y sin esperarlo ni interesarle lo más mínimo acabará uniéndose a esos valores«, decía la intérprete al ser preguntaba por cómo ha sido esa unión de las cinco protagonistas de la serie.

Es más, Blanca Suárez considera que no podrían haber sido otras las elegidas: «Cinco es un número de chicas grande, pero hemos empastado estupendamente y es un gusto trabajar con ellas. El grupo que ha creado la directora de casting ha sido, de casualidad, inmejorable«.

En cuanto a su personaje, la actriz ha explicado que, al empezar a trabajar en Lidia se les presentó un dilema muy importante: «Si queríamos actuar que el espectador oliera o su queríamos actuar la mentira. Y decidimos que la mentira no se actúa, no hay que hacer que mientes, el espectador lo sabe por otras cosas que pasan«.

Vía: bekia.es