Festividades como el día de la madre son la oportunidad para que los publicistas saquen lo mejor de sí y aprovechen la ocasión de sacar toda su creatividad.
Sin embargo, la gente de Skittles llevó las cosas a otro nivel con el comercial que ven más arriba. Probablemente el peor de la historia del día de las madres.
Probablemente el comercial esté logrando el objetivo: que se hable de Skittles y del comercial como tal. Pero de la misma forma, si se habla es justamente por lo perturbador que puede llegar a ser. No se si raya en el mal gusto porque eso depende de cada persona, pero juzguen ustedes.
En realidad es bastante feo. Gracias, Publicistas.