Cuando por fin este australiano llamado Terry decidió que era hora de pedirle matrimonio a su novia Anna, con la que llevaba más de 2 años, no tardó mucho en encontrar el anillo: ella ya lo llevaba puesto sin saberlo.
Es una de las proposiciones de matrimonio más creativas de este año, Terry escondió el anillo de forma tan ingeniosa, que Anna lo estuvo llevando durante más de un año y no se dio ni cuenta. Cuando llegó el momento de revelarlo, ella se quedó estupefacta.