El empresario Óscar Fuenzalida, quien emplazó a Guido Girardi en un vuelo Santiago – Ciudad de Guatemala, realizó un mea culpa por el rosario que le tiró encima al senador por Santiago Poniente.
«Utilicé una forma y tono inadecuados… No me parece que sea la manera de plantear puntos de vista, menos a una autoridad, aunque desapruebe profundamente su desempeño», expresó el dueño de las franquicias de Doggis y Juan Maestro, en conversación con La Segunda.
«Simplemente ocurrió. Sentí la necesidad de decirle lo que pensaba de él y de su desempeño en política», reconoció Fuenzalida al hablar de las motivaciones que tuvo para decirle a Girardi, entre otras cosas, que era un «conchetumadre» y «lo más nefasto que le ha pasado a este país».
Además, el empresario confesó que no suele ser impulsivo, «por lo que no considero que esa reacción sea parte de mi carácter. El episodio fue un acto no premeditado, no busqué las consecuencias ni menos la difusión pública», acotó.
«Nunca imaginé todo el revuelo que se iba a producir. Me parece un hecho absolutamente intrascendente para la vida nacional, por lo que creo que ha sido bastante desmedido el impacto que ha causado. El episodio fue un acto no premeditado, no busqué las consecuencias ni mucho menos la difusión pública del hecho ni yo ni nadie de mi entorno», afirmó.
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