Una hora más de descanso, de fiesta o en el peor de los casos, una hora más de trabajo. Ese es el panorama que vivirán los que habiten suelo chileno este sábado 13 de mayo de 2017, cuando a las 00:00 horas –la medianoche para dar paso al domingo– se deba retrasar en los relojes una hora, para que sean las 23 horas y se dé paso así al horario de invierno.
Esta medida correrá para todas las regiones a excepción de Magallanes y la Antártica chilena, que se mantendrá en el huso horario UTC-3, es decir, el que rige actualmente para el país. Los ciudadanos asentados en esas tierras habían levantado esta demanda hace bastantes años; argumentaban, según Biobiochile.cl, que si se adherían a las modificaciones de todo Chile se oscurecía a las 16 horas.
Las otras regiones regresarán al horario de verano en agosto.