Miles de “indignados” volvieron a manifestarse este miércoles en la ciudad de Barcelona para protestar contra los recortes sociales que impulsa el Gobierno catalán.
Un mes después de las multitudinarias protestas frente al Parlamento, los “indignados” retomaron las acciones coincidiendo con la aprobación de los presupuestos de la Generalitat, que contemplan duros recortes sociales.
Entre fuertes medidas de seguridad y la vigilancia de furgonetas de agentes antidisturbios, miles de personas de todas las edades, se concentraron sobre las 19 horas en Plaza Cataluña en un ambiente reivindicativo para iniciar la marcha hacía el Parlamento.
30.000 personas recorrieron las céntricas calles de la ciudad con lemas de protesta contra los políticos, los bancos y los sindicatos mayoritarios.
Los manifestantes, bajo el lema “la calle es nuestra, no pagaremos su crisis”, pasaron por la Bolsa de Barcelona y el edificio de la patronal catalana.
Los “indignados” llegaron en grupos procedentes de diversos puntos de la ciudad con pancartas en las que se podía leer “Robáis salud”, “Llenan su bolsa vaciando bolsillos”, “Los recortes hacen al pueblo más pobre” y otras en las que pedían la dimisión de miembros del Gobierno catalán.
En el edificio de la Bolsa profirieron abucheos, mientras coreaban: “Manos arriba esto es un atraco”.
Los manifestantes continuaron después su camino hacia el Parlamento, donde llegaron antes de las nueve de la noche y un cordón policial les impidió acceder al recinto del Parque de la Ciutadella.
Para finalizar la jornada, los asistentes realizaron una gran asamblea en la que se decidió llevar a cabo acciones de protesta para este jueves. Las medidas contemplan el corte de las principales vías de acceso a la ciudad, la avenida Diagonal y la avenida Meridiana, a partir de las 7:30 horas. También se realizará una marcha a partir de las 11 h desde Jardinets de Gracia hasta el Hospital del Mar para mostrar el rechazo por el despido de 150 trabajadores.