Como indica su realizador, Matías Rojas, «Represión Chile» explica cómo las clases dominantes utilizan el Estado y la fuerza pública para impedir nuevas formas de expresión social y la participación política activa de la población chilena.
Según Rojas, a través de diversos métodos de control social, «la élite nacional ha logrado someter a la ciudadanía a un modelo que perpetúa la centralización del poder decisorio y profundiza las brechas económicas en el país».
Mediante la fabricación de un enemigo interno, gobiernos alrededor del mundo han perseguido a su disidencia política y declarado la guerra a las libertades individuales. «Hoy, cuando Chile vive un increíble remezón popular, la élite ha intensificado sus mecanismos de manipulación a través de los medios de comunicación y discursos retóricos que pretenden demonizar la protesta social», continúa el director y redactor del sitio Verdad Ahora.
El documental explora las técnicas utilizadas por Carabineros para infiltrar las manifestaciones callejeras y convertirlas en verdaderos campos de batalla. También aborda el constante monitoreo y espionaje de ciudadanos realizados por organismos de inteligencia en el país.
Además, explica cómo las campañas anti delincuencia han sido utilizadas como pretexto para edificar sigilosamente una red de control sobre la población general y beneficiar a sectores privados con la adquisición de contratos concernientes a tecnologías y sistemas de seguridad.
El documental relata la transición efectuada por la cúpula dominante desde la aplicación de la doctrina de Seguridad Nacional en Chile, hasta lo que hoy se conoce como la doctrina de Seguridad Ciudadana. En este contexto, la investigación explora el rol de la Fundación Paz Ciudadana y su fundador, Agustín Edwards, en agresivas campañas comunicacionales de terror.
«Represión Chile» también se dedica a analizar, demostrando la intención de crear la figura de un enemigo interno en el país, las inconsistencias judiciales en el Caso Bombas y el Caso Pakistaní, dando a conocer nueva evidencia sobre un montaje de escalas internacionales en éste último. El documental además aborda la ilegitimidad de la Ley Antiterrorista, y su aplicación sobre el pueblo mapuche y grupos minoritarios desde la dictadura.
Finalmente, según Matías Rojas, el film llama a la reflexión de los uniformados que llevan a cabo la represión y obedecen órdenes inconstitucionales para coartar libertades civiles, planteando una reingeniería filosófica de la institución de Carabineros de Chile.
El Ciudadano
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