Una pareja de Francia murió al instante al ser atropellados por un tren de alta velocidad. Él obligó a su mujer a morir a su lado.
En la localidad de Beauvilliers, al norte de Francia, Guillaume Grémy, de 37 años quiso terminar con su vida, pero quiso que su mujer se fuera con él.
Su esposa, Émilie Hallouin, de 34 años, era la madre de sus 4 hijos pequeños y la pareja llevaba 3 años separada, lo que provocó una profunda depresión en Guillaume.
Émilie se rehusaba a retomar la relación con su marido, hecho que desesperó al hombre, quien la llevó en contra de su voluntad y la ató con cinta adhesiva.
El hombre dejó a su ex mujer en las vías del tren y esperó pacientemente a que éste pasara por el lugar, una vez que vio que se aproximaba, saltó a las vías junto con la mujer. El impacto los mató a ambos automáticamente.
El tren de alta velocidad viaja a 321 kilómetros por hora, por lo que luego de impactar a la pareja, demoró casi 3 kilómetros en detenerse completamente, lanzando los restos a cientos de metros del lugar.