Pocos son los que no se han enterado que uno de los astros del fútbol se casó este fin de semana.
Leo Messi, la estrella argentina del Barça, contrajo matrimonio la noche del viernes con su novia desde hace una década, Antonella Rocuzzo. La pareja, que tiene dos hijos (Thiago y Mateo) se casó el 30 de junio en su ciudad natal, Rosario, en Argentina, ante más de 260 invitados, entre ellos Gerard Piqué y Shakira, Luis Suárez, Sergio Agüero, Javier Mascherano, Gonzalo Higuaín, Ángel Di María, Xavi Hernández, Cesc Fábregas o Carles Puyol y Vanesa Lorenzo.
La novia fue protagonista del enlace gracias a dos vestidos de la creadora catalana Rosa Clará. El primero era blanco, de tirantes, con corte sirena y escote en forma de corazón.
Uno de los gestos más curiosos y comentados fue la patada que Messi le metió al vestido de su ya esposa para apartarlo cuando posaban ante los medios. Sin embargo, pese al empujón, no se vio otro de los detalles más curiosos y mejor guardados del look de la novia: sus zapatos.
El detalle, obviamente, fue imposible de ver, y ha sido la propia marca de calzado, y después Rocuzzo, quienes han compartido las imágenes de los zapatos en sus redes sociales.
Además, la novia quiso compartir más momentos especiales, como una imagen de los novios firmando el acta de matrimonio u otra más curiosa: la de un tatuaje con la fecha de la boda en números romanos que tanto Rocuzzo como Messi se han grabado en el dedo anular.